Edgard Parrales, exembajador de Nicaragua ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) y actual preso político necesita urgentemente realizarse varios exámenes médicos, así lo refirió angustiada su esposa Carmen Dolores Córdova.
El periodista Sergio Marín Cornavaca, director de La Mesa Redonda, se comunicó con Córdova para saber sobre el estado de salud de Parrales, quien desde el pasado 25 de febrero guarda “arresto domiciliar” a causa de las enfermedades crónicas que padece; la esposa del exdiplomático le relató que este necesita realizarse tres exámenes de heces, orina y sangre, pero que la juez a cargo del proceso judicial contra el también analista político no se los ha autorizado a sus médicos personales.
“Él ya tiene más de un mes de estar en casa por cárcel, (antes) estuvo 95 días en la cárcel y ya han ido los lunes cuatro veces los médicos a verlo, pero no le han mandado a hacer exámenes y la juez dijo que le iba a permitir que los especialistas entraran. Se le mandó quiénes eran los especialistas, los nombres y qué trataba cada especialista, y no le han dado la orden del examen”, dijo la señora Carmen.
Parrales de 79 años de edad, es acusado del falso delito de “conspiración para cometer menoscabo” y de “propagación de noticias falsas”.
El exdiplomático necesita exámenes de heces y orina “para ver si no hay sangre oculta, ya que él tiene divertículos, ya no tiene intestino grueso y hay que cuidarle su intestino delgado”, comentó su esposa.
También requiere un examen de sangre para medir la hemoglobina, “a ver si no le ha bajado porque eso indica que está perdiendo sangre”, advirtió Córdova. “Los tres exámenes son importantes”, señaló.
ABOGADOS NO HAN PODIDO HABLAR CON PARRALES
La señora Carmen también indicó que Parrales no ha podido hablar con sus abogados para preparar su defensa, pese a que la juez también lo permitiría.
“La misma jueza iba a permitir que los abogados llegaran una hora a la semana para hablar con él y tampoco ha sucedido eso. Los abogados no lo han podido ver para preparar su defensa”, comentó Córdova.
Parrales fue secuestrado el pasado 22 de noviembre de 2021 por parapolicías y trasladado a ‘El Chipote’, el 25 de febrero pasado fue cambiado a “casa por cárcel” debido a que la vida del también exsacerdote corre peligro por las enfermedades crónicas que padece.
La Ley del Adulto Mayor (Ley 720) ordena a que a las personas mayores de 60 años se les garantice “ante los jueces o tribunales competentes un proceso sencillo, con prelación, celeridad, gratuidad, inmediatez, con las debidas garantías procesales, que le ampare contra actos que violen o puedan violar sus derechos humanos y libertades fundamentales”.
Se prevé que el final del juicio político contra el exdiplomático sea a finales de abril.