Destacados / Nacionales · 05/10/2022

ACNUR concede a activista nicaragüense de 74 años su Premio Nansen

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) anunció el martes que ha concedido su prestigioso Premio Nansen, en su versión regional para las Américas, a la activista nicaragüense Vicenta González, quien ha dedicado su vida a ayudar a las mujeres de su país desplazadas en el norte de Costa Rica.

González, de 74 años, llegó hace medio siglo y recién casada con un costarricense a la localidad de Upala, en Costa Rica, próxima a la frontera con Nicaragua, donde empezó a prestar auxilio como partera y a atender enfermos, lo que le ganó el reconocimiento de la comunidad y atrajo a personas necesitadas de ayuda.

Al presentar a la galardonada, el ACNUR dijo que a una edad donde las personas están ya jubiladas, González sigue “más activa que nunca”, lanzando proyectos comunitarios y ayudando a la gente que escapa de la violencia en la vecina Nicaragua a encontrar trabajo en una zona hundida en el desempleo.

Pero sus proyectos están destinados sobre todo a las mujeres, para ayudarlas a cortar con la violencia machista. Lo primero que hace es brindarles, a ellas y a sus hijos, alimentos y un alojamiento temporal y luego las orienta sobre la mejor manera de empezar una nueva vida.

Nicaragua se encuentra en una crisis política y social desde 2018 y más de 200.000 personas han huido del país desde entonces. Muchas han recalado en la finca de González, que se encuentra a algunos kilómetros de la frontera y donde tiene una plantación de cacao, que ha cedido en parte para financiar la causa que defiende.

El cacao que crece en su plantación de cultivos orgánicos sirve como materia prima para la elaboración de barras de chocolate, té, bebidas y productos cosméticos que las mujeres desplazadas elaboran y venden para generar ingresos.

Estas actividades son organizadas y supervisadas por AMECUP, una asociación creada por la ganadora del Premio Nansen.

A cambio de ello, las beneficiarias -organizadas en cooperativa- prestan una mano en el cuidado de los 3.000 árboles plantados en el terreno.

El premio lleva el nombre de Fridtjof Nansen, un científico y explorador noruego, y primer alto comisionado para los refugiados de la Liga de las Naciones -organización antecesora de Naciones Unidas-, quien asumió la misión de intentar encontrar soluciones para los millones refugiados y apátridas que provocó la Primera Guerra Mundial.

*Con EFE