Berta Valle, esposa del preso político y ex aspirante presidencial Félix Maradiaga, denunció este viernes la “urgente y grave” situación física y de salud en la que se encuentra su esposo y demás presos políticos.
Según Valle su esposo ha perdido unas 60 libras y desde el 21 de junio inició una huelga de hambre para pedir un cese de la incomunicación total a la que son sometidos los presos políticos y el régimen de confinamiento solitario en el que están las mujeres presas políticas.
Berta expuso que la vida de su esposo y otros presos políticos, están en un momento de inflexión, algunos de ellos con más de tres años de estar en confinamiento solitario y en condiciones de tortura.
Indicó que los presos políticos están “en auténticas celdas de tortura en las que son sometidos a condiciones infrahumanas y de tortura permanente, sin alimentación o atención médica adecuada, en aislamiento, oscuridad o luz permanente, sin acceso a luz solar y sin ningún contacto humano o con sus familiares”.
En sus palabras, los presos políticos están en “una situación de vida o muerte”.
Durante su exposición, Berta expuso un retrato hablado digital elaborado por un artista que colabora con la campaña #SeHumano, quien ha trabajado con los familiares de su esposo y de otros presos políticos para reflejar de la manera más fiel posible las condiciones actuales en las que se encuentra Félix.
Las repercusiones no solo atentan contra su vida actualmente, sino que además representan métodos de tortura que afectan su capacidad sensorial y cognoscitiva de forma permanente. Estas eran las mismas tácticas de “tortura blanca” utilizadas en las dictaduras de Uruguay y Argentina, conocidas como unas de las más sanguinarias de la historia.
“Por los testimonios de Félix y otras personas presas políticas forenses y médicos especialistas en temas de tortura han dictaminado que lo que el estado de Nicaragua está practicando en contra de Félix y de todas las personas que sufren junto con él, es la denominada ‘Tortura Blanca’ que se basa en infligir una extrema privación sensorial y un aislamiento con el objetivo de anular sus capacidades cognitivas para que la persona torturada pierda su identidad y todo lo que los hace humanos”, indicó en un comunicado.
“La situación es tan grave, que debido a su débil condición física y de salud, están muriendo lentamente, en las condiciones actuales, es cuestión de tiempo”, añadió.
Valle demanda al régimen orteguista “cesar el aislamiento extremo” a los presos políticos, tener una biblia y poder comunicarse con sus familiares cercanos, sobre todo los que tienen hijo/as menores de edad.
“Necesitamos que el mundo reaccione y abogue por nuestros familiares. Acompañamos esta huelga de hambre, lanzamos un ruego de clemencia y compartimos este sentido de urgencia, por la preservación de su integridad física y sus vidas. Mañana será muy tarde”, apuntó.
Berta propuso un día de ayuno y oración en el que invita a cristianos, fieles de otras religiones y hombres y mujeres de buena voluntad a que participen para pedir por un cese de la situación grave en la que se encuentran los presos políticos.
La conferencia contó con el acompañamiento del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) y Amnistía Internacional.