Brutal zarpazo a la UCA
El brutal zarpazo de la dictadura Ortega-Murillo a la Universidad Centroamericana, UCA, al declararla “terrorista” y confiscarla a favor del estado, muestra que nada ni nadie detiene a este régimen en su afán de convertir a Nicaragua en un país totalitario, oscurantista, anti-pueblo y estatista, que significa llevar al pueblo hacia una nueva etapa de decadencia, pobreza, y absoluta falta de libertades públicas.
El confiscar a la universidad privada de mayor prestigio histórico de Nicaragua, que tanto ha aportado al desarrollo cultural, científico y académico, acusando a sus dirigentes de “terrorismo”, constituye una absoluta injusticia para todos los miembros de esta comunidad universitaria, estudiantes, administradores y docentes, que con su trabajo hicieron de ella una de las mayores contribuciones de la orden jesuita en Nicaragua, después del colegio Centroamérica, hacia el desarrollo, la transformación y la proyección de un mejor futuro para la sociedad nicaragüense. Es más, no solo es una injusticia sino un agravio a una universidad que desde su fundación se distinguió por su alto espíritu científico, progresista y pacífico, trasmitido a miles de profesionales humanistas, con sensibilidad social y grado académico de excelencia, y sus ideales de una Nicaragua distinta.
Pero este último acto de agresión de la tiranía en contra del pueblo y sus instituciones, que más bien insinúa que han enloquecido, lleva a expresar unas vez más, condenas, lamentos y quejas por parte de los nicaragüenses de dentro y fuera del país, pero que a la vez nos desafía y suscita hacia el avance hacia la consecución de un solo frente opositor combativo que desplace a la dictadura, que sigue allí, burlándose de los muchos pronunciamientos y actos simbólicos de la OEA, la ONU, la UE y los Estados Unidos, que no mellan el poder de un régimen que sigue en su avance desbocado de hacer de Nicaragua un satélite total del izquierdismo mundial, y de las potencias rusa y china, constituyendo un enclave de alto riesgo en la misma cercanía de los Estados Unidos, sin que se vea a la fecha, una verdadera acción defensiva que comience a poner en su lugar a esta nefasta nueva versión del sandinismo.
El Partido Humanista Social Cristiano de Nicaragua, PHSC, a la par de condenar enérgicamente este zarpazo dictatorial a la UCA, que pretende aplastar el último bastión sólido de la educación superior en Nicaragua, no puede sino también lamentar la lentitud con que los nicaragüenses y sus organizaciones caminamos hacia la construcción de una unidad pluralista, eficaz, capaz de encabezar con una estrategia efectiva, una acción liberadora en Nicaragua.
No podemos continuar solo quejándonos cuando suceden estas atrocidades del régimen orteguista, tenemos que apresurar el desarrollo de una acción convergente en la que todos los grupos existentes, pongan de su parte para tener un instrumento efectivo para luchar decidida- y eficazmente, contra la dictadura.
Basta ya de solo lamentos. La hora ha llegado de pelear unidos y con toda la fuerza por una Nicaragua libre y democrática.
*Consejo Ejecutivo Nacional del Partido Humanista Social Cristiano de Nicaragua, PHSC.