El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció que todas las celdas de los pandilleros serán selladas para evitar que puedan tener contacto con otros reos que se encuentran presos en siete cárceles de seguridad.
Desde el lunes, las autoridades iniciaron los trabajos para sellar muchas celdas con estructuras de hierro en uno de los sectores del penal de Izalco, en Sonsonate.
El gobierno justificó esta medida por el alza de homicidios en los últimos días, ya que para las autoridades, las órdenes de asesinatos han sido ordenadas desde la prisión.
“Vamos a forrar con estructuras metálicas las celdas para que no tengan ninguna comunicación entre ellos; tenemos informes de inteligencia que las órdenes han salido de las cárceles y eso no lo vamos a permitir que lo sigan realizando”, advirtió Osiris Luna, director de Centros Penal en una inusual conferencia de prensa en la cárcel de Izalco.
Luna dijo que los mareros que salen de las prisiones son los responsables de llevar las órdenes del incremento de homicidios. Sin embargo, no detalló qué pandilleros ni de qué prisiones han salido en tiempos de cuarentena, lapso en el que se han incrementado los hechos sangrientos.
En los últimos tres días ha habido más de 67 muertes violentas en diferentes puntos del país. Esto rompió la tendencia de escasos casos sangrientos durante la cuarentena domiciliar obligatoria.
La medida, impulsada por orden de Bukele en los penales, impedirá la clasificación de reos de maras por grupos al que pertenezcan como MS, 18, Mao Mao, La Máquina, entre otras. Esto como parte de la emergencia máxima en el sistema penitenciario.
Los penales con reos pandilleros están en Izalco, Quezaltepeque, San Francisco Gotera, Ciudad Barrios y Zacatecoluca.
Además, Bukele informó que comenzarían a sellar las celdas donde están los pandilleros. “Ya no se podrá ver hacia afuera de la celda. Esto evitará que puedan comunicarse con señas hacia el pasillo. Estarán adentros, en lo oscuro, con sus amigos de la otra pandilla”, señaló en su cuenta de Twitter.