CENIDH exige al régimen realizar pruebas de COVID-19 a nicaragüenses varados en Peñas Blancas
Ayer el dictador Daniel Ortega envió antimotines a Peñas Blancas para evitar que los centenares de nicaragüenses que se encuentran varados desde unos tres días en la frontera ingresen a Nicaragua.
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) denunció el actuar represivo de Ortega. “En estos momentos CENIDH recibió información sobre llegada de fuerzas armadas a Peñas Blancas para evitar que los 150 nicaragüenses varados en la frontera ingresen a Nicaragua”, alertó el organismo en Twitter.
El CENIDH informó que el régimen orteguista pide a los nicaragüenses una prueba del COVID-19 negativa como requisito para el ingreso, por lo que demandó que este realice los testeos y deje entrar a las personas a su país.
“Los nicaragüenses, que renunciaron a su condición de refugiados en Costa Rica se encuentran a esperas de que el gobierno les autorice la entrada, pero las autoridades migratorias como nuevo requisito exigen presentar examen negativo de COVID-19, de lo contrario no los deja entrar”, señaló.
“CENIDH repudia que el régimen Ortega Murillo niegue el ingreso a estos compatriotas y les intimide con las armas. Es su obligación como gobierno hacerles la prueba de COVID-19 y según el resultado garantizarles la salud y no dejarlos en la frontera”, exigió el organismo.
Aunque se habla de 150 nicaragüenses, el medio costarricense La Cruz TV de Guanacaste contabiliza hasta 400 personas que se encuentran en el lugar a la espera que el régimen de Ortega les permita el ingreso a su propio país.
Según el medio tico, ayer por la noche llegaron más nicas a Peñas Blancas a bordo de dos autobuses, todos han dormido en la intemperie. Entre los nacionales hay niños y adultos mayores.
El CENIDH reiteró que los nicas tienen derecho a ingresar a su país aún durante la pandemia, y que el régimen Ortega Murillo “DEBEN GARANTIZAR LA ENTRADA Y LAS PRUEBAS DE COVID-19 A ESTOS COMPATRIOTAS”.