Nacionales · 11/03/2021

CIDH reitera rechazo a Ley de Agentes Extranjeros en Nicaragua

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) publicó este jueves el boletín del Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI) en el cual reiteró su rechazo a Ley de Regulación de Agentes Extranjeros en Nicaragua, conocida también como “Ley Putin”.

La CIDH recordó que el 26 de febrero rechazó la implementación de la “Ley Putin” por las afectaciones que implicaba a varias organizaciones de la sociedad civil, y que pidió al régimen de Daniel Ortega derogarla, llamado que fue ignorado.

La Comisión insistió que tal legislación resulta contraria a los estándares internacionales.

La “Ley Putin”, establece multas, sanciones y autoriza a solicitar la intervención de bienes y activos, así como la cancelación de la personalidad jurídica a las ONG si intervienen en “cuestiones, actividades o temas de política interna”, un concepto que la legislación dejó abierta a la interpretación del régimen orteguista.

Asimismo, clasifica como “agente extranjero” a las personas naturales o jurídicas nicaragüenses o de otra nacionalidad “que respondiendo a intereses y obteniendo financiamiento externo utilicen esos recursos para realizar actividades que deriven en injerencia de Gobiernos, organizaciones o personas naturales extranjeras en los asuntos internos y externos de Nicaragua”.

La CIDH también destacó que, con la falta de independencia de los órganos del Estado, esta ley prevé el objetivo de “producir un efecto inhibitorio del debate público y de la participación democrática” especialmente en el marco de las elecciones del próximo 7 de noviembre.

El organismo agregó que a esta ley se suman otras que “tendrían por finalidad generar un efecto de amedrentamiento que limita la libertad de expresión”, entre ellas la ley de ciberdelitos, la ley de defensa de derechos del pueblo y la reforma al Código Procesal Penal.

El boletín que informa sobre la situación de los derechos humanos en Nicaragua, mantiene las cifras de la represión: 328 personas asesinadas, más de 110 presos políticos, más de 405 profesionales de la salud despedidos, más de 90 periodistas exiliados y más de 103.600 nicaragüenses que huyeron a países vecinos.