Nacionales · 19/11/2020

Coalición urge ayuda a la comunidad internacional para damnificados, pero a través de agencias de la ONU y no del régimen

La Coalición Nacional hizo un “llamado urgente” a la comunidad internacional para brindar su apoyo a través de donaciones para los damnificados del huracán Iota y Eta que devastaron varias ciudades del país.

Sin embargo, el bloque opositor subrayó que esta ayuda sea a través de las agencias del Sistema de Naciones Unidas en colaboración con las agencias de cooperación y Organismos no Gubernamentales internacionales con presencia en Nicaragua. Es decir, la Coalición pidió que las donaciones no se den directamente a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo debido a sus “antecedentes”.

“La Coalición Nacional hace un llamado urgente a la solidaridad de los pueblos y gobiernos hermanos, para brindar una vez más su apoyo generoso a nuestra población abandonada y reprimida por el régimen, en condiciones de emergencia extrema y en situación real de desastre, a través de los diversos mecanismos de la cooperación internacional, con el fin de iniciar un amplio programa de atención de emergencia a las poblaciones afectadas”, solicitó.

“Teniendo en cuenta los antecedentes del régimen de Ortega y Murillo, que mediante la Policía ha boicoteado la ayuda humanitaria que la población ha tratado de llevar para auxiliar a las familias damnificadas, y a fin de evitar el uso partidario y el manejo inadecuado por parte del Gobierno, asegurando la transparencia y eficiencia en el uso de los recursos, solicitamos que la cooperación sea coordinada y administrada mediante las agencias del Sistema de Naciones Unidas, en colaboración con las agencias de cooperación y Organismos No Gubernamentales extranjeros con presencia en el país, para que la ayuda humanitaria se proporcione directamente a la población afectada y sus organizaciones civiles, con el propósito de reconstruir comunidades enteras, que hoy están devastadas”, agregó la Coalición.

Indicó que la devastación provocada por Iota y Eta ha puesto a la población nicaragüense en “un riesgo inminente de hambruna e inseguridad alimentaria severa”.

La Coalición detalló que a la fecha, más de 60.000 personas se encuentran desplazadas y muchas más han perdido sus viviendas, enseres, medios de vida y alimentos básicos para su sobrevivencia.