Nacionales · 18/04/2022

Con Marcha de las Cruces se conmemora en Miami los cuatro años de la rebelión cívica en Nicaragua 

*Por Voces en Libertad

Previo al 19 de abril, la diáspora y exiliados nicaragüenses en Miami marcharon exigiendo la liberación de los presos políticos y la restauración de la democracia

Partiendo del consulado de Nicaragua en Miami, la diáspora y exiliados nicaragüenses realizaron ayer el recorrido por la pequeña Habana con la denominada Marcha de las Cruces. A un día de aquel 19 de abril histórico de 2018, los manifestantes conmemoraron, el domingo 17 de abril, esa insurrección cívica que dejó luto y dolor a las familias nicaragüenses que aún repudian a la dictadura orteguista. 

Han pasado cuatro años y abril no se olvida, porque se concretó en Nicaragua la rebelión cívica de un pueblo que se oponía a unas reformas al sistema de seguridad social y que también se cansó de la falta de democracia en el país, por lo que desencadenó una serie de manifestaciones contra el régimen de Daniel Ortega, quien respondió con represión dejando un saldo de más de 300 muertos y miles de heridos producto de la violencia, que es denunciada por organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). 

Uno de los manifestantes en denunciar los atropellos del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo fue Juan Gabriel Mairena, hermano del líder campesino y preso político Medardo Mairena, el cual dijo que “gracias a todos por la lucha de Nicaragua, es Nicaragua la que está secuestrada que le están robando sus propiedades, es un honor estar aquí honrando a todos los muertos, es un honor seguir exigiendo justicia por todos los jóvenes y niños asesinados. Los invito a todos a seguir exigiendo la libertad de los presos políticos, se intentó hacer la competencia de unas elecciones porque no queríamos volver a derramar la sangre de los nicaragüenses como en los 80, sigamos desde acá en el exilio”. 

Cuatro años clamando libertad para los reos de conciencia 

Los nicaragüenses radicados en Miami y de otros lugares de Estados Unidos siguen alzando la voz por los que no pueden hacerlo, como son los más de 180 presos políticos que, de acuerdo a sus familiares, están padeciendo torturas sicológicas y físicas por expresar su pensamiento y por desear un país libre, justo y democrático. Además, la mayoría se encuentra con descompensación en la salud y se repudia que producto del encarcelamiento arbitrario haya muerto el férreo opositor, Hugo Torres, quien durante la dictadura somocista liberó a su verdugo, Daniel Ortega.  

En ocasión del cuarto aniversario de las masivas protestas contra la pareja dictatorial Ortega – Murillo, el clamor del pueblo es el mismo: libertad inmediata para los rehenes políticos. Entre las consignas de los manifestantes se escuchaban “Justicia, Justicia, Justicia”, “Libertad a los secuestrados políticos”, “De que se van, se van” “sanciones, sanciones”, “Viva Monimbó”, “Viva León”, Viva Matagalpa”, “la patria no se vende, se ama y se defiende”.

Los asesinatos no se olvidan, no se perdonan 

En esta Marcha de las Cruces, participaron nicaragüenses que fueron marcados por el golpe de la pérdida de un ser querido a raíz de los asesinatos orquestados por los Ortega – Murillo. Migueliuth Sandoval, viuda del periodista Ángel Gahona, Nelson Lorío y Carolina Navarrete Sánchez, padres de Taylor Lorío asesinado en 2018 estuvieron encabezando esta patriótica caminata. 

En el muro del Facebook de Migueliuth Sandoval se lee: “4 años se dicen fácilmente, pero para las víctimas de la represión de abril 2018 no ha pasado un solo día, estamos viviendo en el día que nos arrebataron a nuestros seres queridos, estamos en abril en donde las madres perdieron a sus hijos que salieron a defender la patria, más un asesino dictador los recibió con balas a manos de paramilitares”.

“Nada ha cambiado en Nicaragua”

Para Sandoval, Nicaragua sigue sumergida en oscuridad, y recuerda con dolor y tristeza su huida del país y la de miles de exiliados, que necesitaban proteger su vida de la persecución y cacería estatal para callar a todos los que no aprueban la pésima gestión del régimen Ortega – Murillo. 

Nada ha cambiado todo sigue igual en nuestro país, luchando desde adentro y desde afuera, con la Fe que Dios obra en el tiempo Perfecto. 4 años en donde el dolor es intenso, y más que intenso, la impotencia de ver que aún no hay justicia, ni para nuestros mártires, ni libertad para nuestros presos políticos. Somos muchos nicaragüenses exiliados en diversas partes del mundo, mi linda Nicaragua sabes que en Abril dueles más que otros meses”, expresó la viuda del periodista Ángel Gahona desde su cuenta en Facebook. 

Durante la Marcha de las Cruces, se honró la memoria de los asesinados en el 2018, se exigió justicia por los reos de conciencia, se clamó por democracia y libertad para el pueblo de Nicaragua. También se denunció las violaciones de derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad por parte de la dictadura sandinista. 

Nicaragua se resiste al dictador

Desde la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, también hubo pronunciamiento en el que demandan la “justicia para las víctimas, libertad y democracia para el pueblo. Mientras en Nicaragua siga reinando la injusticia, la impunidad, la represión y el autoritarismo, la negación de los derechos históricos de los pueblos indígenas y afrodescendientes, la lucha del pueblo seguirá teniendo vigencia. Nuestra historia demuestra que los nicaragüenses no podemos acostumbramos a vivir en la opresión”, se lee en el comunicado. 

Además, denuncian que la dictadura de Ortega y Murillo continúa hundiendo al país en la corrupción, la pobreza y la inseguridad.

Cada conmemoración de los días de abril que movilizaron a cientos de miles de nicaragüenses nos convoca a reafirmar nuestros compromisos con Nicaragua. Durante esos días, vimos un derroche de solidaridad, patriotismo y amor por el país, en las multitudinarias marchas y plantones que se realizaron a lo largo de todo Nicaragua. La resistencia del pueblo nicaragüense en estos cuatro años ha sido admirable a pesar de la embestida criminal de los Ortega – Murillo. A medida que pasa el tiempo la dictadura se desgasta y descompone de manera más profunda como lo muestra el creciente descontento a lo interno de sus filas. La represión es su único sostén, pues solo así pueden garantizar su permanencia en el poder”, dicta el comunicado.