El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) demandó este jueves que las autoridades orteguistas de Nicaragua retiren los cargos de difamación penal contra la periodista Kalúa Salazar, jefa de prensa de radio La Costeñísima en Bluefields.
El 10 de agosto, tres empleadas de la alcaldía orteguista de El Rama, presentaron una demanda por supuesta difamación contra Salazar, en respuesta a una nota radial del 4 de agosto sobre presunta corrupción en la comuna.
“Las autoridades nicaragüenses deben retirar los cargos de difamación penal contra la periodista Kalúa Salazar y garantizar que los medios de comunicación puedan informar libremente”, dijo hoy el CPJ.
“Los funcionarios públicos no deben abusar de las leyes de difamación criminal para evitar la rendición de cuentas e intimidar a los periodistas. Tales leyes no deberían estar en los libros en primer lugar”, dijo Natalie Southwick, Coordinadora del Programa de América Central y del Sur del CPJ, en Nueva York. “Los periodistas tienen el derecho y la responsabilidad de informar sobre temas de interés público y garantizar la transparencia sin sufrir represalias. Los funcionarios nicaragüenses deben retirar los cargos penales contra Kalúa Salazar sin demora”, agregó.
El CPJ envió un correo electrónico al municipio de El Rama para solicitar comentarios, pero no recibió respuesta, e indicó que no pudo encontrar la información de contacto de las empleadas municipales que presentaron la demanda.
En comunicación con el CPJ, la periodista expresó que cree que la demanda tiene como objetivo “silenciar el trabajo de La Costeñísima”, uno de los pocos medios de comunicación independientes en la costa caribeña de Nicaragua.
“Existe una situación de intimidación contra los trabajadores de La Costeñísima que ha ido en aumento. Ellos [el gobierno] me acusan de promover el discurso de odio en las noticias”, dijo Salazar al CPJ, y dijo que regularmente recibe mensajes amenazadores mientras presenta en vivo el programa de noticias La Costeñísima.
El miércoles, Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN), emitió un comunicado expresando su preocupación de que la demanda pueda ser utilizada para silenciar los reportajes de La Costeñísima en la región caribeña.