Destacados / Internacionales · 27/05/2022

Dictadores de Cuba, Venezuela y Nicaragua, critican a Washington por no invitarlos a Cumbre de las Américas

Los dictadores de Cuba, Venezuela y Nicaragua cerraron este viernes filas con sus socios de la Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (ALBA) en su pulso con Estados Unidos por su exclusión de la Cumbre de las Américas.

En una cumbre de líderes de la ALBA celebrada en La Habana, los dictadores de estos tres países reiteraron sus críticas a Washington por no invitarlos al encuentro, y resaltaron las quejas que ha suscitado esta decisión en todo el continente.

Subrayaron que la exclusión de la cita que se celebrará en Los Ángeles, entre el 6 y el 10 de junio, es “arbitraria, ideológica y políticamente motivada”, además de suponer un “grave retroceso histórico en las relaciones hemisféricas”, según el comunicado final.

“Esa decisión unilateral es un grave retroceso histórico en las relaciones hemisféricas que ofende a los pueblos latinoamericanos y caribeños”, señalaron los países miembros del foro regional tras concluir una cumbre de un día en La Habana y convocada por sorpresa el pasado martes.

Se trata de prácticas “antidemocráticas” e “injerencistas”, cuando a los Estados Unidos “ni política ni moralmente les corresponde” el derecho de decidir quién puede asistir a la cita, según el dictador de Cuba, Miguel Díaz-Canel.

Criticó en concreto que Washington se arrogue un “poder fiscalizador de la democracia” y afirmó que los Estados Unidos “no son capaces de asegurar un espacio plural” e “irrespetan las diferencias” entre los distintos sistemas políticos.

El dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó a su vez de “errática” la convocatoria porque “se pretende excluir de esa reunión que se autodenomina Cumbre de las Américas” a países que integran el continente.

Los pueblos de la región no podrán ser jamás excluidos de ninguna reunión que pretendan llamar cumbre, los pueblos de las Américas estamos hoy más firmemente claros de lo que es nuestro destino, nuestro destino es la unión, la liberación”, manifestó.

El dictador de Nicaragua, Daniel Ortega, consideró al intervenir en videoconferencia que la Cumbre de las Américas ha dejado de ser un “arma útil” para aplicar su Doctrina Monroe, porque “en el mundo ya no existe espacio para el hegemonismo”.

Otro de los líderes que avanzó que no participaría en una cita con exclusiones fue el presidente de Bolivia, Luis Arce, quien este viernes en La Habana reiteró su decisión.

Rechazamos la exclusión de pueblos hermanos en la Cumbre de las Américas”, aseguró Arce, convencido de que “ningún país puede arrogarse el derecho de decidir quién forma parte o no del continente”.

Además de México y Bolivia, otros países de la región han puesto en duda su participación en la Cumbre de las Américas, como Honduras y Guatemala; mientras que varios más han expresado su desacuerdo, como Argentina y Chile.

La ALBA cuenta con diez miembros: Antigua y Barbuda, Bolivia, Cuba, Dominica, Granada, Nicaragua, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, y Venezuela, y dos invitados especiales (Haití y Surinam).