La administración de Joe Biden está trabajando con socios internacionales para preparar nuevas sanciones que podrían imponerse en respuesta a las elecciones del 7 de noviembre en Nicaragua, y que Washington ha denunciado como una “farsa” organizada por el dictador Daniel Ortega, según reporta la agencia Reuter, citando a funcionarios estadounidenses.
El gobierno de Estados Unidos, también ha comenzado una revisión de la participación de Nicaragua en un acuerdo de libre comercio regional CAFTA-DR, y ya ha detenido el apoyo a cualquier actividad de “creación de capacidad comercial” que se considere beneficiosa para el régimen de Ortega, dijo a Reuters un alto funcionario del Departamento de Estado bajo condición de anonimato.
El Departamento del Tesoro ha impuesto medidas financieras punitivas y prohibiciones de viaje a Estados Unidos a decenas de funcionarios nicaragüenses, incluidos miembros de la familia Ortega por su involucramiento en violaciones de derechos humanos, corrupción y lavado de dinero.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo en un comunicado la semana pasada que Ortega y Rosario Murillo, están “preparando una elección falsa, desprovista de credibilidad, al silenciar y arrestar a los opositores”.
Una fuente del gobierno de Estados Unidos aseguró que se están preparando nuevas sanciones para después de las elecciones, y el funcionario del Departamento de Estado también señaló que tal medida era probable.
“Continuaremos utilizando las herramientas diplomáticas y económicas a nuestra disposición para promover la rendición de cuentas de quienes apoyan los abusos de derechos humanos del régimen de Ortega y los ataques a la democracia nicaragüense”, dijo el funcionario del Departamento de Estado.
“Tenemos herramientas de sanciones. Estamos trabajando con socios internacionales, así como en foros multilaterales, de manera que defiendan nuestros valores, y continuaremos haciéndolo”, agregó el funcionario.
Ambos funcionarios se negaron a identificar posibles objetivos de sanciones o proporcionar el momento para nuevas medidas.
Revisión del CAFTA-DR
Funcionarios estadounidenses también advirtieron que la membresía de Nicaragua en el acuerdo comercial regional CAFTA-DR, que otorga un trato preferencial a las exportaciones centroamericanas a Estados Unidos, podría estar en peligro si Ortega manipula las elecciones a su favor.
El funcionario del Departamento de Estado confirmó que ya se estaba realizando una revisión. “Continuamos revisando su participación en cualquier programa de asistencia patrocinado por Estados Unidos”, dijo el funcionario.
El funcionario reconoció, sin embargo, que la administración estaba discutiendo posibles obstáculos legales a cualquier suspensión de Nicaragua del pacto comercial, lo que algunos expertos han sugerido que podría complicar cualquier acción.
Una persona familiarizada con el asunto dijo que también había preocupaciones dentro de la administración de que la expulsión de Nicaragua podría afectar su economía en apuros lo suficientemente fuerte como para empeorar la difícil situación humanitaria de los nicaragüenses, estimulando una mayor migración hacia la frontera entre Estados Unidos y México.
Aproximadamente la mitad de las exportaciones de Nicaragua van a los Estados Unidos, y los aranceles se mantienen bajos bajo el CAFTA-DR.