Destacados / Nacionales · 18/07/2022

El 19 de julio, “una fecha cuyo significado ha sido pisoteado y degradado”, dicen organizaciones opositoras

Al menos 17 organizaciones de la oposición desde Nicaragua y el exilio, expresaron este lunes que el 19 de julio, fecha en la que se conmemora la revolución sandinista, se ha convertido en una fecha “sin nada que celebrar ni conmemorar ni venerar”, a causa de que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha “usurpado, traicionado y convertido” tal acontecimiento “en la peor tragedia histórica” del país.

Las organizaciones firmantes llenas de indignación y dolor, consideramos lamentable que la fecha en la que el pueblo de Nicaragua celebró la salida de un dictador, un 19 de julio de 1979, una victoria que fue usurpada, traicionada y convertida en la peor tragedia histórica con consecuencias que hasta hoy seguimos viviendo, sea hoy una fecha más en el calendario, vacía de su significado. Las aspiraciones de libertad, democracia y paz siguen pendientes”, dijeron las organizaciones mediante una declaración.

Las firmantes responsabilizaron “directamente a la dictadura Ortega Murillo, por el deterioro del país, el sufrimiento, encarcelamiento, secuestros, exilio forzoso y muerte de miles de nicaragüenses desde ese momento hasta el presente”.

Hoy así como hace 43 años y como en la década de los 80, el pueblo vive una nueva dictadura, tan o más sangrienta y totalitaria que la dinastía de los Somoza. Los Ortega–Murillo se han encargado de desmantelar el sueño al que aspiramos millones de nicaragüenses al derrocar a la dictadura de Anastasio Somoza, ha destruido la institucionalidad democrática que empezaba a construirse y, a partir de 2018 recurrió nuevamente de forma descomunal a la violencia por mantener el control absoluto del país, eliminando los espacios de la sociedad civil organizada, anulando el Estado de Derecho, ensañándose contra los derechos humanos e incrementando así sus crímenes de lesa humanidad”, apuntaron.

Para las organizaciones “no hay nada que celebrar, mucho menos la liberación de un pueblo que sigue siendo asesinado, no concebimos una celebración, conmemoración o veneración en una fecha cuyo significado ha sido pisoteado y degradado como la propia vida de los ciudadanos, dejando solo el recuerdo del deseo continuo de un Pueblo por respirar, alcanzar y mantener viva la esperanza de libertad como la tuvimos en 1979”.

Añadieron que los nicaragüenses son los responsables de “terminar con este sufrimiento frente a un régimen ilegítimo que se sostiene por el poder de la fuerza atacando a un pueblo desarmado”.

En nosotros radica la fuerza para poder realizar el cambio por medio de la vía cívica hacia la transición democrática. Exigimos la salida inmediata de la dictadura criminal de los Ortega – Murillo, la liberación de los más de 190 presos políticos, el respeto a las libertades públicas y el regreso seguro de los más de 144 mil exiliados nicaragüenses que hay alrededor del mundo”, expresaron.