El eurodiputado José Ramón Bauza denunció a través de su cuenta de Twitter la manipulación del régimen de Daniel Ortega sobre las cifras del COVID-19 en Nicaragua, para poder obtener el préstamo de 43 millones de dólares que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), le aprobó a principios de agosto.
El BID le otorgó a Ortega dicha cantidad a través del “Programa de Respuesta Inmediata de Salud Pública para Contener y Controlar el COVID-19 y Mitigar su Efecto en la Prestación del Servicio en Nicaragua”, el cual estará bajo la supervisión de tres organismos internacionales.
Para que el Banco le diera al dictador el préstamo millonario, este expuso datos estimados de la pandemia en Nicaragua que sobrepasan, incluso, los datos oficiales del Ministerio de Salud (MINSA).
Ortega aseguró al BID que, de no aprobarse el préstamo, el contagio en Nicaragua hasta septiembre rozaría los 6 millones, y las muertes serían más de 23 mil; mientras que el MINSA proyectaba sólo 813 muertes, y 32.500 contagios en los primeros seis meses de la pandemia en el país.
Sin embargo, el último reporte del MINSA es que en Nicaragua supuestamente hay 4.668 casos de COVID-19 y 141 muertes, por lo que las cifras que Ortega le dio al BID están muy lejanas.
“Ortega y Murillo llevan mintiendo a los nicaragüenses desde el inicio de la pandemia. Los datos del COVID-19 que dieron a @el_BID se los ocultan al pueblo. Exijo a @JosepBorrellF las cifras que se le han dado a la Unión Europea para ver hasta dónde llegan las mentiras del régimen”, dijo Bauzá, agregando un documento enviado a la UE en la que pide explicaciones por la “disparidad” de las cifras del COVID-19 en Nicaragua.
“La respuesta de las autoridades nicaragüenses a la epidemia del COVID-19 ha estado marcada desde el principio por la falta de transparencia y el desprecio a la gravedad de la enfermedad. A raíz de la concesión a este país de un préstamo por parte del Banco Interamericano de Desarrollo, hemos podido conocer que el régimen de Ortega traslado a esta institución su previsión de más de cinco millones de contagios y hasta 23.000 fallecidos, en claro contraste con la proyección inicial del Ministerio de Salud de 32.500 contagios y 800 fallecidos. Esta enorme disparidad en las cifras comunicadas a la población, por un lado, y a organismos internacionales por el otro, evidencia que el gobierno de Nicaragua oculta a la ciudadanía la escala real de la pandemia para justificar su pasividad, mientras que admite en privado las graves carencias en su respuesta al virus”, reza el documento.
El eurodiputado agregó: “¿Han trasladado las autoridades nicaragüenses al Servicio de Acción Exterior o los Estados Miembro alguna estimación del impacto del COVID-19 en el país desde el comienzo de la pandemia? En caso afirmativo, ¿qué previsión de infectados y fallecidos comunicaron?”.
A principio de agosto, el BID indicó que el dinero es para “fortalecer la capacidad de respuesta del sistema de salud en Nicaragua”.
Las acciones del Programa contribuirán a reducir la morbilidad y mortalidad por COVID-19 y mitigar otros efectos sanitarios indirectos de la pandemia, con especial énfasis en las poblaciones más vulnerables.
El BID detalló que el proyecto enfatizará tres líneas de trabajo: fortalecer la detección y seguimiento de los casos, apoyar esfuerzos para la interrupción de la cadena de transmisión de la enfermedad y mejorar la capacidad de provisión de servicios.