Nacionales · 23/09/2021

Familiares de opositores secuestrados en El Chipote temen por la vida de estos y los daños irreversibles a su salud

Los familiares de los opositores secuestrados en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) conocida como El Chipote, alertaron mediante un comunicado, sobre “el riesgo inminente de daños irreversibles” a la salud de los más de 30 detenidos y “más por su vida”.

“Con angustia y sentido de urgencia, alertamos sobre el riesgo inminente de daños irreversibles a la integridad física y psicológica de nuestros familiares. Tememos aún más por su vida. A pesar de la situación de desnutrición severa y hambre en que los encontramos, persiste la negativa al ingreso de alimento, adicionalmente continúan pidiendo medicinas que evidencian malestares gastrointestinales y vértigos, vinculados a su deficiente alimentación. Así mismo, niegan el ingreso de abrigo y material de lectura”, reza el documento de los familiares.

En el texto, señalan que persiste el régimen de aislamiento e incomunicación de sus familiares. “En la única vez que se nos permitió verles, fueron evidentes las condiciones extremas a las que están siendo sometidos, que están afectando gravemente su estado de salud físico y mental, y que constituyen actos de tortura”, dijeron.

Los familiares destacan que a pesar de que los jueces apercibieron que las visitas y entrevistas con ellos y los abogados deben realizarse, las autoridades de El Chipote no han cumplido.

“En audiencia inicial, los judiciales reafirmaron el derecho a recibir las visitas de sus familiares y garantizar las entrevistas con las y los abogados defensores. Pese a esto, las autoridades en la DAJ omiten cumplir con lo ordenado por los jueces de audiencia”, apuntaron.

Los familiares demandaron nuevamente al Estado de Nicaragua, al Poder Judicial y a la Dirección de Auxilio Judicial, que se establezca un calendario claro de visitas periódicas y en condiciones de privacidad; que se respete el derecho a la defensa; que las familias puedan proporcionarles al menos un tiempo de comida al día a nuestros familiares para garantizar alimentos sanos, completos y alineados con sus necesidades particulares; cese inmediato del aislamiento y cese a los interrogatorios sin la presencia de sus abogados.

También exigieron que se les reciba frazadas, colchas y ropa de abrigo para combatir el frío que sienten todas las noches; garantía de entrega de paquetería; otorgar al menos 20 minutos de sol al día; y que los juicios sean públicos.

Los familiares abogaron por la liberación “inmediata y sin restricciones” de todas las personas presas políticas, tanto de las detenidas desde el mes de mayo, así como la de las más de 130 personas presas desde antes de esa fecha.