Destacados / Nacionales · 15/11/2022

Familiares de presos políticos demanda una “prueba de vida”, tras más de 80 días de no saber nada de ellos

Familiares de las personas presas políticas secuestradas en la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como ‘El Chipote’, demandaron este martes una “prueba de vida” de estos, pues llevan más de 80 días de no saber nada de sus parientes.

Hacemos de conocimiento público nuestra extrema preocupación porque han transcurrido más de dos meses sin que tengamos ninguna visita, ni noticia de nuestros familiares presos políticos en el Chipote. El día de hoy nuestros familiares cumplen en incomunicación absoluta, 81 días, en el caso de los detenidos desde mayo 2021 y más de 60 días, en el caso de los detenidos entre septiembre y noviembre 2022”, señalaron las familias en una declaración.

Pedimos una prueba de vida”, exigieron. Al mismo tiempo que demandaron que junto a organismos de Derechos Humanos puedan ingresar “urgentemente” a El Chipote y a las distintas cárceles del sistema penitenciario y estaciones policiales de todo el país, “para constatar la situación de todas la personas presas políticas”.

Las familias expresaron que llevan “más de dos meses de sufrimiento e incertidumbre; de no tener ningún tipo de información respecto a la condición de salud, acceso a atención médica y alimentación de nuestros familiares”.

“Nuestras solicitudes orales tanto de visita, así como de información sobre el estado y paradero de nuestros familiares han sido denegadas por las autoridades de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) sin ninguna justificación. Estamos alarmados y sumamente angustiados. Ante esta grave situación, hacemos un llamado urgente al Estado de Nicaragua para que nos permita ver a nuestros familiares”, reiteraron.

Temen por las vidas de sus familiares presos y presas por “las condiciones inhumanas en que les mantienen, sobre todo, la de quienes se han declarado en huelga de hambre”.

No tenemos ninguna garantía ni de fe de vida, ni de su estado de salud. A la fecha, ni siquiera tenemos certeza si se encuentran en el mismo lugar donde les visitamos por última vez”, apuntaron.

Las familiares demandaron la regularización de las visitas cada 15 días como lo ordena la Ley, con presencia y participación de hijas e hijos menores y/o con necesidades especiales; así como acceso y regularización a llamadas telefónicas/videollamadas y correspondencia como fotografías, dibujos y cartas, que incluyen a familiares en el exterior.