La fiscalía de El Salvador allanó el Congreso, en búsqueda de documentos y archivos informáticos de supuestos actos de corrupción en la contratación irregular de personal que cobraba un salario, pero no llegaba a trabajar, en el caso denominado “plazas fantasmas”.
El hecho fue calificado como histórico y, según explicó el fiscal de la unidad anticorrupción, German Arriaza, en este momento, se está “analizando la posibilidad de un tipo penal que se llama peculado y también otro tipo penal de actos arbitrarios, verdad pero es la investigación misma la que nos va a establecer tanto la existencia de los delitos”.
El presidente del congreso Salvadoreño, Mario Ponce, quien finalizará su período el 30 de abril, dijo que colaborarán con la investigación.
“Que debe tener ingreso libre e irrestricto a cualquier lugar a donde ellos quieran entrar, este órgano de Estado no entorpece ninguna investigación, al contrario, ponemos a disposiciones nuestras unidades para que ellos puedan recabar las pruebas”, afirmó Ponce.
La investigación se originó tras la denuncia que hizo el sindicato del Congreso.
Según el abogado de la organización no gubernamental Acción Ciudadana, Eduardo Escobar, esta será determinante.
“Esperamos que concluya en imputaciones y, si ese es el caso, contra los responsables de este tipo de hechos, pero digo que sea la investigación de la fiscalía la que determine responsabilidades”, dijo el abogado.
El caso de las “plazas fantasmas” salió a la luz, tras el gane en las pasadas elecciones del partido Nuevas Ideas, que promovió el presidente Nayib Bukele, y el cual tendrá mayoría en el Congreso. Los nuevos diputados asumirán sus funciones el 1 de mayo con la promesa de combatir la corrupción.
*VOA