Nacionales · 12/02/2022

General en retiro Hugo Torres Jiménez no tendrá honras fúnebres ni ceremonias públicas

El general en retiro Hugo Torres Jiménez falleció este sábado 12 de febrero estando secuestrado por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, informó su familia a través de una nota de duelo, en la que indicó que no se le celebrarán honras fúnebres ni ceremonias públicas.

“Nosotros Hugo Marcel, María Alejandra y Lucia Aracelly comunicamos con profundo dolor el fallecimiento de nuestro adorado padre, Jorge Hugo Torres Jiménez. Quisiéramos expresar nuestro sincero agradecimiento a todos los familiares y amigos que nos han manifestado su solidaridad y oraciones. Por voluntad expresa de nuestro padre no se celebrara honras fúnebres ni ceremonias públicas. Posteriormente daremos a conocer más información al respecto. En estos momentos tan difíciles, la familia solicita respeto a la privacidad y al luto que estamos atravesando. Esperamos la comprensión de todos y todas los que apreciaron en vida a nuestro amado padre”, reza la nota de duelo.

Torres Jiménez, fue secuestrado por la Policía Orteguista el 13 de junio de 2021, y habría sido llevado de emergencia al hospital el pasado 17 de diciembre.

“El 17 de diciembre de 2021, Hugo Torres fue sacado de la celda que compartía con otros prisioneros en El Chipote; que durante las últimas semanas había enfermado rápidamente y que sus compañeros tuvieron que auxiliarlo varias veces, porque, por el grado de inflamación de sus piernas, casi no podía moverse por sí mismo. Fue atendido por médicos del penal, pero no lograron aliviar su situación. Ese día, Hugo sufrió un largo desmayo. De su celda fue sacado con rumbo desconocido”, relató en un escrito publicado en Confidencial, Mónica Baltodano, ex compañera de guerrilla Torres Jiménez.

Antes de ser secuestrado el exgeneral grabó un video en el que declaró: “Tengo 73 años de edad, nunca pensé que, en esta etapa de mi vida iba a estar luchando de forma cívica y pacífica contra una nueva dictadura. La dictadura de los Somoza no logró encarcelarme (…) hace 46 años arriesgué la vida para sacar de la cárcel a Daniel Ortega y a otros compañeros y en 1978 volví a arriesgarla junto con Dora María Téllez y otros compañeros para liberar a aproximadamente 60 presos políticos, entre ellos Tomás Borge, Doris Tijerino, René Núñez y otros; pero así es la vida, así son las vueltas de la vida y los que una vez acogieron principios en favor de la justicia, en favor de la libertad, hoy los han traicionado, hoy son los principales enemigos de esos principios”.

La periodista Tifani Roberts aseguró en su cuenta de Twitter que a Hugo Torres “le negaron atención médica. Cuando se agravó lo secuestraron al hospital de la policía, la familia lo visitaba en silencio por miedo que si abrían la boca le negaran acceso. Nunca sabremos qué pasó porque el gobierno ha perdido toda credibilidad”.

Torres Jiménez se integró a la guerrilla del Frente Sandinista para luchar contra la dictadura de Anastasio Somoza Debayle, a pesar de ser hijo de un subteniente de la Guardia Nacional que defendía al régimen somocista.

En diciembre de 1974 fue uno de los 13 guerrilleros del comando bautizado “Juan José Quezada” que tomó como rehenes a un nutrido grupo de altos funcionarios del régimen somocista que asistían a una fiesta en honor al embajador estadounidense en Nicaragua, Turner Shelton. El diplomático norteamericano evitó caer en mano de la guerrilla sandinista porque poco antes abandonó la recepción.

Después de tres días de negociaciones, los guerrilleros consiguieron que Somoza les entregara, a cambio de los rehenes, un millón de dólares y liberara a 14 presos del Frente Sandinista que mantenía en sus cárceles, entre ellos Daniel Ortega, quien purgaba una pena de 14 años por el asalto a un banco en noviembre de 1967.

Cuatro años después, Torres participó en una operación similar, como segundo al mando de un comando guerrillero que se tomó el Palacio Nacional donde sesionaba el parlamento. “Hugo es el único que intervino en las dos operaciones comando más grandiosas efectuadas por el FSLN”, explicó Baltodano.

Al triunfo de la insurrección armada contra Somoza, Torres pasó a ser viceministro del Interior del gobierno revolucionario y poco después fue trasladado al Ejército Popular Sandinista (ahora Ejército de Nicaragua) donde llegó a alcanzar el grado de general de brigada, al momento de su retiro en 1990.

Como disidente del Frente Sandinista, se integró al Movimiento Renovador Sandinista (MRS) que ahora se llama Unamos. Llegó a ser diputado centroamericano por esta agrupación y mantenía fuertes críticas sobre el comportamiento del régimen de su antiguo camarada de armas y a quien, en 1974, ayudó a sacar de la cárcel.

Torres fue acusado por la Fiscalía de cargos de traición a la patria, según la “Ley de Defensa de los Derechos del pueblo a la Independencia, la Soberanía y Autodeterminación para la Paz”, aprobada por los diputados sandinistas a la víspera con un solo artículo, la cual ha sido usada como comodín por el régimen para encarcelar a opositores y críticos de su gestión.