Destacados / Nacionales · 22/03/2023

Gioconda Belli y Sergio Ramírez muestran en Madrid su esperanza de cambio en Nicaragua

Los escritores nicaragüenses Gioconda Belli y Sergio Ramírez expresaron este miércoles en Madrid su esperanza de cambio en Nicaragua y subrayaron que “ningún dictador” va a “arruinar” sus vidas, tras ser despojados de la nacionalidad por el régimen de Daniel Ortega.

En un homenaje organizado por la Casa de América en Madrid, el director de esta institución, Enrique Ojeda, dijo que este acto celebra “sus numerosísimas obras literarias, pero también por supuesto su vida, su entereza como intelectuales y ciudadanos”.

El encuentro sirvió para “exaltar su compromiso cívico y de defensa de los derechos humanos en Nicaragua, Centroamérica y todo el mundo”, declaró Ojeda.

“Estamos aquí para celebrar sus vidas y obras y entregar un abrazo a quien sufre intolerancia e incomprensión”, afirmó.

El exilio es provechoso y aquí (en España) he encontrado un hogar, si no fuera por la solidaridad que hemos recibido, me habría muerto de tristeza, aún estoy triste, pero sentir que eres querido, que vas a poder, es inspirador”, dijo por su parte la escritora.

Belli aseguró que después de participar en la revolución sandinista (1979-1990) que derrocó al dictador Anastasio Somoza nunca pensó “vivir otra vez un exilio, esta atrocidad de ser expulsados, expatriados de lo que posees”.

“Es realmente durísimo”, reconoció la poeta, quien criticó que el régimen de Daniel Ortega “se ha vuelto cada vez más represor”.

No olvidamos que la política es parte de nuestra vida pero no toda nuestra vida, no voy a dejar que un dictador me arruine la vida, que se me acabe la inspiración de escribir, hay cosas en la vida que son retos que, al contrario de lo que parece, te sacan fuera otras cosas que has tenido ahí”, afirmó.

UN ESCRITOR “NO PUEDE ESCAPARSE” DE SU REALIDAD

Por su parte, Ramírez quiso parafrasear al poeta nicaragüense Rubén Darío para explicar cómo la realidad de su país impacta en su literatura y en su vida, al afirmar que “se ocupaba de la política porque esta es universal”.

Es difícil ser ajeno al relato político, porque la realidad que se te ofrece es sustancialmente política, no podría haber sido yo un escritor de historia de marcianos, uno no puede escaparse, uno se ocupa de la política al escribir porque no tiene otra realidad”, manifestó el escritor, que fue vicepresidente de su país a finales de la década de 1980.

Ambos escritores se refirieron a un posible regreso a Nicaragua, aunque Ramírez dejó claro que no lo hará “si no hay atisbos evidentes de cambio”.

No aceptaría volver y que las condiciones sigan siendo las mismas, para vivir aislado, donde no haya medios de comunicación y no pueda ejercer mi palabra, esa Nicaragua no me interesa”, señaló.

Belli compartió su deseo de que “esta noche oscura” que es el exilio “no se vuelva a repetir”.

“Volver será encontrarme con toda la gente que no está aquí, que nos hemos dispersado por tantas partes, gente con la que hemos pensado, luchado, construido… y me gustaría pensar que voy a recuperar mi casa, más que nada el paisaje que se ve desde allí, sentarme en esa terraza y tomar un ron de caña”, compartió.

Por último, agradecieron a todos los países que les han ofrecido nacionalidad desde que Ortega les despojó de la suya, como España, Argentina, Ecuador, México, Colombia (que tomó él) y Chile (que tomó ella).

“Lo tomas como un gesto político de solidaridad y respaldo”, dijo Ramírez, mientras que Belli consideró que es “una afirmación política y de cariño” que “puede dar fruto de una política exterior diferente” hacia Ortega.

*Con EFE