La jueza orteguista Deyanira Traña admitió la acusación contra la periodista Kalúa Salazar, jefa de presa de radio La Costeñísima, pese a que la parte acusatoria no reúne los requisitos de ley, informó este miércoles el abogado defensor Boanerges Fornos.
El juicio contra Salazar fue programado para el próximo 23 de septiembre. La joven periodista está siendo acusada por “injurias y calumnias” por tres trabajadoras de la Alcaldía orteguista de El Rama, luego que una fuente que pidió no divulgar su identidad, denunciara ante La Costeñísima las irregularidades que presuntamente involucran a estas funcionarias.
“Como defensa consideramos que el poder no requería los requisitos formales, estaba orientado hacia otras cosas, sin embargo la juez aun así decidió darle pase al poder. La querella de igual forma no reunía los requisitos formales, sin embargo también decidió admitirla. Y, a pesar de que los elementos de convicción ofrecidos son insuficientes y que si acaso hubo algo fue una publicación periodística, decidió remitir la causa a juicio para el día 23 de septiembre”, dijo el abogado Fornos al salir del Complejo Judicial de Bluefields.
Se conoció que las tres funcionarias orteguistas pidieron a la judicial que impusiera tres medidas cautelares extremas contra Kalúa como el impedimento de salida del país, vigilancia y la presentación periódica ante el Tribunal, esto no fue admitido.
Fornos agregó que la querella contra la periodista no detalla datos importantes, y que la acusación es bastante confusa, señalando hechos que no constituyen delitos y que plantea situaciones contradictorias.
Por su parte, Kalúa Salazar expresó que espera que el proceso “sea de conformidad a la ley y justo”, porque pudo notar la “mala intención” de la parte acusatoria.
“Imagínense que estaban solicitando medidas cautelares contra mí, como una persona que me cuidara y cuestiones así, se puede notar la mala intención y difícilmente podemos comprender que esto esté sucediendo aquí en Bluefields por ejercer nuestro trabajo, por presentar un noticiero, por estar del lado del pueblo”, declaró Salazar.
Gremio de periodistas rechaza asedio
Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN) denunció que en la víspera del juicio por calumnia contra la jefa de prensa de Radio La Costeñísima, efectivos de la Policía Orteguista asediaron las instalaciones de esta emisora, así como las casas de habitación del personal de la radio.
“PCIN responsabiliza al régimen Ortega-Murillo y a sus fanáticos, de la integridad física y psicológica a que han sido sometidas bajo presión directa, las personas que laboran en La Costeñísima en su afán de anular las voces del periodismo independiente porque ‘les molesta’ la audiencia que ha alcanzado la emisora, su preferencia por la población y su posición crítica al poder público”, reza el PCIN en una nota de prensa.
Para PCIN es evidente el interés del régimen de Ortega en “querer apropiarse de La Costeñísima contra toda medida legal”.
“Invitamos a la opinión pública nacional e internacional nos acompañen en esta denuncia y manifiesten su solidaridad activa con Kalua y el colectivo de La Costeñísima. Asimismo, denunciamos la judicialización de los colegas William Aragón, Elsa Espinoza y David Quintana, lo cual evidencia un patrón de ataques y la continua criminalización del ejercicio periodístico y otras acciones encaminadas a dañar la imagen pública de periodistas, equipándoles con actos ilícitos en su contra”, concluyó PCIN.
Por su parte el Foro de la Prensa Independiente de Nicaragua rechazó los actos de intimidación de la Policía Orteguista y paramilitares que “están constantemente asediando e intimidando no solo las oficinas de Radio La Costeñísima, sino las casas de habitación de sus periodistas y personal de apoyo”.
“Hacemos responsable al gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo de la integridad física de los periodistas y personal de apoyo que laboran en La Costeñísima, así como la seguridad física del local, sus equipos de transmisión y demás inventario de oficina”, expresó el Foro en un comunicado.