Nacionales / Salud y Vida · 28/05/2020

“Libro Blanco” sobre COVID-19 aviva señalamientos contra Ortega

El “Libro Blanco” del régimen orteguista sobre la pandemia de COVID-19 avivó el miércoles los señalamientos contra el dictador Daniel Ortega, a quien consideran “no apto para gobernar”, pues creen que, lejos de aclarar la estrategia para contrarrestar al coronavirus, se trata de la confesión de sus errores.

Según sus críticos, Ortega confirmó en el “Libro Blanco” su apuesta por el modelo de Suecia, de buscar la “inmunidad del rebaño”, sin tomar en cuenta las diferencias entre el segundo país más pobre de Latinoamérica y uno de los más desarrollados del mundo, sin equipar al sistema y personal de salud para la pandemia, ni tomar en cuenta el costo en vidas humanas.

En el “Libro Blanco”, el régimen Ortega-Murillo presume tener un modelo “singular” contra la pandemia, se compara con Suecia, culpa de sus limitaciones al levantamiento popular de 2018 contra Ortega, que llama “golpe de Estado fallido”, y acusa al periodismo independiente de crear “noticias falsas”.

“Es una confesión del enorme error que este Gobierno cometió, con un sistema de salud precario decidieron imitar a Suecia, que incluso fracasó, sin pruebas de si funcionaría la teoría de la inmunidad del rebaño, pusieron en riesgo a la población de Nicaragua, que ahora se encuentra en la etapa de crecimiento exponencial del contagio”, dijo Carlos Tünnermann, coordinador de la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia a la agencia EFE.

“Este régimen no tiene derecho a exponer a la población. El error trágico de la opción que tomó este Gobierno con la ‘inmunidad del rebaño’ está haciendo que el pueblo de Nicaragua esté pagando un altísimo costo”, lamentó.

Tünnermann, uno de los intelectuales nicaragüenses más prestigiosos, criticó fuertemente las mentiras del “Libro Blanco”, entre estas, “decir que tenían 19 hospitales preparados, querer dar a entender que el sistema público de salud de Nicaragua se debilitó por lo que llama fallido intento de golpe de Estado, que se saquearon hospitales, que se incendiaron unidades de salud de atención primaria, ambulancias quemadas, nada de eso se ajusta a la realidad”, sostuvo.

Recordó que los sucesos de 2018 fueron documentados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), y el Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI), a quienes Ortega nunca brindó pruebas del “golpe de Estado” en su contra.

La alta comisionada Michelle Bachelet afirmó que la Acnudh “ve con preocupación el aumento en las dos últimas semanas de expresiones estigmatizadoras en el discurso de las autoridades, como en el “Libro Blanco” recién publicado, desacreditando a quienes critican públicamente la respuesta del Gobierno al COVID-19″.

Por su parte, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) condenó “la irresponsabilidad y actitud criminal del régimen ante esta situación de emergencia, son una amenaza para el mundo, Ortega no sólo deberá responder por las víctimas de la represión de abril de 2018, también por las de la pandemia”.

Según Ortega, la pandemia hasta ahora ha contagiado a 759 personas y dejado 35 muertos, no obstante, el independiente Observatorio Ciudadano COVID-19 cuenta 2.687 casos, con 598 fallecidos.

*Con información de EFE