Un total de 100 ciudadanos nicaragüenses que se encontraban varados en Panamá arribaron este martes al país vía terrestre, según una nota de prensa del Ministerio de Gobernación de Nicaragua (MIGOB).
Los 100 nicaragüenses, 53 hombres y 47 mujeres, ingresaron a las 4:30 por el puesto fronterizo Peñas Blancas fronterizo con Costa Rica.
El documento de MIGOB asegura que el Ministerio de Salud (MINSA), realizó “revisión rigurosa para descartar síntomas de contagio COVID-9 y les dará seguimiento domiciliar en la cuarentena de 14 días”, algo que no hizo con el grupo de 89 nicaragüenses que arribaron al país el domingo pasado.
Más de mil nacionales llevan más de una semana intentando volver al país luego de haber perdido los medios de vida que tenían en Panamá, a causa de la pandemia de coronavirus, pero enfrentaron dificultades por las restricciones por parte del régimen de Daniel Ortega.
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Ortega ha negado la entrada a más de 500 nacionales desde que la pandemia fue decretada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), los cuales permanecen en países vecinos, incluyendo islas en el mar Caribe y barcos en altamar.
Coalición Nacional exige seguridad a los nicaragüenses varados en el extranjero
Este mismo martes, la Coalición Nacional exigió al régimen de Ortega que garantice la seguridad de los nicaragüenses que intentan retornar al país.
“Una vez más la dictadura Ortega-Murillo muestra su actuar negligente e irresponsable con los ciudadanos nicaragüenses al negar en reiteradas ocasiones el derecho constitucional a sus ciudadanos a entrar y salir libremente del país sin más requisitos que los que la ley establece”, reza el comunicado publicado por el bloque opositor.
La Coalición sostuvo que negar la entrada de los nicaragüenses a su propio país constituye una nueva violación a los derechos constitucionales y una grave violación a los derechos humanos de los ciudadanos, “colocándolos no sólo en un limbo migratorio, sino también en especial situación de vulnerabilidad en el contexto de la pandemia, exponiendo peligrosamente a contraer dicha enfermedad a más de 800 personas varadas en Panamá, entre los que se encuentran mujeres embarazadas y menores de edad”.