Más de 360 académicos de todo el mundo, firmaron una declaración sobre la situación de Nicaragua, en la que le demandan al dictador Daniel Ortega a que libere a todos los presos políticos del país, incluyendo a los candidatos presidenciales de oposición y los actores de la sociedad civil.
“Nosotros, las y los firmantes, somos académicos e investigadores de la política y sociedad de América Latina, muchos de nosotros enfocados en Nicaragua. Estamos gravemente preocupados por el trato a ciudadanos opositores por parte del gobierno nicaragüense”, reza la declaración firmada en total por 365 personalidades.
Todos, hicieron un llamado a la comunidad internacional a presionar al régimen de Ortega para que revoque leyes que restringen las libertades civiles y permita elecciones verdaderamente libres y justas en noviembre.
“Desde 2018, el gobierno del presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo ha resistido cualquier llamada para realizar elecciones adelantadas o implementar reformas democratizadoras. Al contrario, el gobierno parece haber decidido a asegurar que las elecciones programadas por noviembre de 2021 sean muy lejos de libres y justas”, indicaron.
Los firmantes manifestaron que hasta el 9 de junio, la policía ha detenido a cuatro de los precandidatos presidenciales más visibles de la oposición—Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, y Juan Sebastián Chamorro—así como miembros de sus equipos y familias, y también han sido detenidos líderes del sector empresarial y la sociedad civil, entre ellos el expresidente del Consejo Superior de Empresa Privada (COSEP) José Adán Aguerri, la activista Violeta Granera, y el exministro y economista José Pallais. Otros activistas y periodistas están amenazados o bajo vigilancia, mientras que las actividades de los grupos de la sociedad civil y las organizaciones internacionales están restringidas.
“Hacemos un llamado urgente al gobierno de Nicaragua para que cese esta represión, libere a todos los prisioneros políticos, y trabaje con la oposición para comprometerse a organizar elecciones libres y justas. Si el gobierno no toma acciones inmediatas para cumplir con estas condiciones, es imperativo que los gobiernos, los organismos intergubernamentales, y las organizaciones internacionales colaboren para aumentar la presión diplomática sobre el gobierno Ortega-Murillo, siempre tomando precauciones para evitar impactos colaterales sobre el pueblo nicaragüense tras varios años de dificultades económicas”, apuntaron.
Los firmantes destacaron que todos los nicaragüenses merecen la posibilidad de determinar “quién los gobierna y merecen vivir sin temor del Estado”.