Este jueves se realizó la audiencia inicial contra Monseñor José Leonardo Urbina Rodríguez, sacerdote de la Iglesia del Perpetuo Socorro en Boaco, acusado de supuesta violación a una menor de 14 años. La audiencia realizada en el Complejo Judicial de Managua fue ampliamente abordada por los medios orteguistas que expusieron el nombre y la imagen de la madre de la menor de edad.
En redes sociales y sitios web de medios orteguistas se publicaron fotos y videos de la señora “lo cual constituye una violación a las leyes que expresan que se debe de proteger la identidad para que no se pueda identificar y revictimizar a la menor de edad”, señaló el abogado y exfuncionario del Poder Judicial, Yader Morazán.
El jurista nicaragüense y crítico de la dictadura Ortega-Murillo dijo a través de sus redes sociales: “Sin referirme a la culpabilidad o no del padre Urbina, debo decir que me da pesar todo el show que se hace de un caso que según la ley se debería de tratar con discreción para no re victimizar a la víctima procesal. El fin del régimen justificó el medio. ¡Pobre la niña!”.
“Trabajé por más de 5 años de cara a las víctimas en audiencia de violencia, y es la primera vez que veo que la policía en una audiencia informativa hace el trabajo de los equipos interdisciplinarios compuestos por psicólogas y trabajadoras sociales de los juzgados. ¡Show en Vivo!”, insistió.
Morazán explicó que “el Código de la Niñez y la Adolescencia, concede el derecho a la intimidad personal y familiar de todo adolescente, y prohíbe publicar y divulgar cualquier dato de investigación o proceso que directa o indirectamente posibilite su identidad. Hacerlo es ilegal ( Art.106 ley 287)”.
Además, “con más razón, los jueces especializados en violencia tienen la obligación de no agravar más las condiciones de sufrimiento de una víctima, evitando la reiteración innecesaria, molestias o estigmas que puede causar cualquier proceso (inciso j del art. 4 de la Ley 779)”, añadió.
Por otro lado, “la policía en un proceso penal ni siguiera es parte procesal para atender y acompañar a las víctimas y/o sus representantes, ya que su rol se limita a custodiar a los acusados, y aportar o garantizar elementos objetivos de investigación. Obvio, ¡cuando no es show!”.
“De ahí, la razón por la cual vemos a actores. Perdón, policías sin dar una debida intervención en crisis, ya que esa no es esa la forma adecuada de acompañarla en su dolor, y menos darle agua para bloquear un mecanismo natural de desahogo como es el llanto, cuando hay llanto”, comentó.
En un video que circula en redes sociales publicado por “periodistas” orteguistas se muestra cuando la madre de la menor le grita e intenta llorar –sin lágrimas—al padre Urbina.
“Abusaste de la confianza de mi hija. Viejo violador. Jueces, les pido como madre, les pido justicia. Mi hija está sufriendo. No saben cómo me siente como madre. Les pido a la gente de Boaco que me apoyen, por qué lo apoyan a él si es un violador”, dice entre gritos la mujer.
Morazán agrega que “en medio de todo. Lo que más pesar me da, es el daño irreversible que le están haciendo a la niña con todo este show innecesario. ¡Se imaginan los señalamientos que le harán sus compañeros de clase en la escuela, y comunidad en la que deberá seguir habitando! ¡Pobre niña!”.
LA AUDIENCIA CONTRA EL RELIGIOSO
La jueza Miroslava Calero, Titular del Juzgado Segundo Especializado en Violencia de Managua, ordenó remitir la causa a juicio oral y público al sacerdote.
Según medios orteguistas, el Ministerio Público a cargo del fiscal Enmanuel Álvarez, ofreció pruebas “científicas”. Entre ellas un examen médico legal, realizado a la menor donde supuestamente “se confirma que fue víctima de violación”.
Además señalan que el supuesto delito “fue descubierto, luego que la menor intentara suicidarse, y al ser interrogada por la abuela; fue que confesó que había sido víctima de las agresiones sexuales por parte del sacerdote”.
La judicial mantuvo la medida cautelar de prisión preventiva para el religioso.