Nacionales · 06/08/2020

Ministra de Trabajo de España sobre muerte de nicaragüense: “Su situación era deplorable, habla mal de nuestro país”

La ministra de Trabajo de España, Yolanda Díaz, confirmó el miércoles que el nicaragüense Eleazar Blandón falleció “por estrés térmico” tras trabajar en doble jornada de mañana y tarde recogiendo fruta “a más de 44º sin ningún tipo de protección”.

Eleazar Blandón originario de Jinotega, murió el pasado sábado 1 de agosto de un golpe de calor tras ser abandonado en un hospital de Murcia, en España.

La muerte de Blandón destapó las vergüenzas a las que habitualmente se ven sometidos los jornaleros que trabajan recolectando frutas y verduras en la huerta española, donde las temperaturas superan los 40 grados en esta época del año.

“Las condiciones en las que se estaba desempeñando esa actividad eran deplorables”, “es un hecho luctuoso, dramático, que habla muy mal de nuestro país”, dijo ayer la ministra.

Díaz aseguró que hay dos investigaciones en marcha, la penal y la de la Inspección de Trabajo, que se va a extender a todos sus compañeros de finca.

“Las que se estaba desempeñando esa actividad eran deplorables. Su jornada se extendió desde las 7.00 de la mañana hasta las 14.00 horas y luego se prolongó en la recolección de melones en una finca adyacente hasta largas horas de la tarde, a una temperatura de 44 grados sin ningún tipo de protección. Y el trabajador murió por estrés térmico”, indicó la ministra.

Eleazar Blandón se marchó de Nicaragua en octubre pasado huyendo del régimen de Daniel Ortega, buscando un futuro mejor para su pareja y sus cinco hijos.

Eleazar Blandón (q.e.p.d.)

Eleazar se desplomó en plena faena de recolección, pero su patrón no llamó al servicio de ambulancias, que es gratuito, y esperó a que sus compañeros concluyesen la jornada laboral para ser trasladado en la furgoneta que habitualmente utilizan los trabajadores de regreso a casa.

Blandón no tenía papeles. Buscaba en España una vida mejor para su familia. Se había involucrado en las manifestaciones contra el régimen de Daniel Ortega y empezó a recibir amenazas.