Bajo el argumento que “no es necesaria la prueba” del coronavirus porque “no han salido del país”, el Ministerio de Salud (MINSA) le está negando el derecho de un diagnóstico a más de diez personas que presentan síntomas del COVID-19, internados en el Hospital Vivian Pellas en Managua. Así lo reveló una fuente fidedigna a La Mesa Redonda.
Nuestro informante dijo que “hay más de diez personas bajo observación” en dicho hospital privado, por presentar cuadros similares a los síntomas del COVID-19. Los sospechosos “son personas de buena posición económica” y según la fuente están en habitaciones privadas.
“Obviamente prefieren pagar cualquier cantidad de plata antes que ir a un hospital del Estado. Incluso están negociando las tarifas por día para pasar sus periodos de cuarentena ahí”, detalló.
Sin embargo, pese a tener los recursos económicos, a estas personas se les está negando su derecho a que se les realice un test, pues las autoridades del MINSA “no le han dado respuesta al hospital para comprar las pruebas”, confió la fuente.
“El argumento del representante del MINSA es que si no han salido del país o si un familiar no lo ha hecho. No es necesaria la prueba”, señaló.
La fuente sostuvo que personal del Ministerio de Salud llega dos veces al día al hospital. Agregó que el Vivian Pellas ha estado insistiendo con el MINSA para la realización de las pruebas y trasladar a los pacientes a un centro médico donde reciban el tratamiento adecuado.
En Nicaragua, el MINSA ha confirmado ocho casos positivos de coronavirus, de estos, cinco están recibiendo atención médica, dos fueron dados de alta y uno falleció el 26 de marzo pasado.
El régimen de Daniel Ortega maneja con total hermetismo la situación del COVID-19 en Nicaragua. Hasta la fecha no han dicho cuantas pruebas ha realizado, las que están centralizadas en el laboratorio central del MINSA, y se niega a que hospitales y laboratorios privados obtengan los kits para diagnosticar la enfermedad.