Destacados / Nacionales · 18/05/2023

Mónica Baltodano: No me quita el sueño los ataques en redes sociales

La exguerrillera nicaragüense exiliada Mónica Baltodano, tomó distancia este jueves 18 de mayo, de los ataques que recibe en las redes sociales, al asegurar que estos “no le quitan el sueño”, pues vienen de “troles” orteguistas que buscan dividir aún más a los grupos de la oposición nicaragüense.

Si algo tenemos que cambiar en Nicaragua, es la necesidad de ser capaces de ser tolerantes con la diversidad y entender que precisamente uno de los elementos brutales de la dictadura es el de uniformar y el de querer ponernos a todos una etiqueta y cuando desde la oposición se cae en ese tipo de enfoques, de alguna manera distancia las posibilidades de construir una gran convergencia que va a ser indispensable se queremos realmente cambiar la situación en Nicaragua y acabar con la dictadura”, dijo Baltodano en entrevista con La Mesa Redonda.

Yo estoy clarísima que una parte de los enfoques descalificadores son producidos por troles, yo por eso no le pongo mucha mente a las cosas que se dicen en las redes sociales, no me quita el sueño eso, porque estoy absolutamente convencida de que una de las debilidades de las redes es que son manipulables por mecanismos tecnológicos”, añadió.

Yo estoy clara que el régimen tiene una red de troles y creo que ninguno de nosotros deberíamos afligirnos demasiado por los ataques que nos tratan de descalificar y profundizar esa división que ya existía, pero que de alguna manera la misma lucha ha venido subsanando porque todos vamos a ser necesarios para botar a Ortega”, aseguró.

También críticas de “voces extremistas”

La exguerrillera también se refirió de las expresiones de personas que invalidan a los que vienen del sandinismo en la lucha contra la dictadura de Ortega y Murillo.

Son voces muy extremistas, porque si vos mirás a otras figuras importantes de la oposición, incluso muchos de los que salieron de la cárcel no tienen ese tipo de posturas extremistas. Al final siempre habrá de uno o de otro lado gente que se aísle y se quede con ese discurso, pero hay que seguir sin cansarnos en este esfuerzo”, aseveró.

Añadió que en la lucha contra la dictadura Ortega-Murillo hay “mucha gente que viene del sandinismo, y para esta gente sectaria no le importa si te separaste en el 80, si te separaste en el 90, en el 94 de esta dictadura, y sin embargo a ellos no les importa; entonces no hay que hacerles caso”.

Para la exguerrillera “el trabajo va irse sobreponiendo a esos enfoques sectarios que son absurdos”.

Conozco mucha gente que viene del liberalismo, que viene de la Contra, que está hombro con hombro con gente que provenimos de distintas corrientes y sin estarnos preguntando ‘de dónde venís’, sino qué es lo que hay que hacer, qué tareas hay que realizar para poder salir adelante en la complejísima tarea de salir de una dictadura”, recalcó.

“Juntar a los parecidos”

A juicio de Baltodano, en la lucha contra la dictadura, primero se deberían “juntar todos los parecidos”, y luego construir “una verdadera convergencia de todos los nicaragüenses”.

Antes de hacer una unidad de todos, deberíamos de comenzar por juntar a los parecidos, trabajar y crear las condiciones adentro del país, pero afuera del país. Yo estoy clarísima de que los cambios requieren organización dentro del país, no es fácil con los niveles de represión que se tienen, pero se tiene que organizar también el exilio”, opinó.

Se tiene que juntar a los parecidos, mostrar músculos concretos de organización, de movilización, eventualmente estarse encontrando en acción, tender puentes y que en un momento que no es fácil se pueda construir una verdadera convergencia de todos los nicaragüenses en un programa mínimo y planes de trabajo”, agregó.

Baltodano afirmó que “nadie quiere más guerra”, que la lucha contra Ortega tiene que ser “democrática” y por “la vía cívica”.

Gira por Sudamérica

La también exdiputada, vive exiliada junto a su familia en Costa Rica, y recientemente realizó una gira por países de Sudamérica para “hablar en nombre de miles de sandinistas que hemos venido criticando desde hace muchos años al orteguismo” y que han denunciado su “deriva autoritaria” y las “graves violaciones a los derechos humanos”.

El objetivo de la gira,–sostuvo—fue “llegar a sectores de izquierda” que estuvieron vinculados en la revolución sandinista de los años 80’ y querían escuchar “por qué aquella revolución había terminado en esta nueva dictadura con este personaje nefasto Daniel Ortega y su comparsa Rosario Murillo”.

Baltodano que visitó Brasil, Argentina y Uruguay, aclaró que no pudo reunirse con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, pero que sí lo hizo con su asesor Celso Amorim.

Mónica Baltodano junto a Celso Amorim

*Fotos cortesía