La activista nicaragüense Haydée Castillo, integrante de la plataforma opositora Espacio de Diálogo y Confluencia se refirió el jueves al anuncio hecho por la Unión Europea (UE) sobre el “inicio de una nueva fase renovada” entre el bloque europeo y Nicaragua; y la relajación de sanciones al régimen de Daniel Ortega.
El pasado 27 de noviembre, la UE acordó relajar algunas disposiciones de las sanciones impuestas a una decena de regímenes, entre ellos Nicaragua para “facilitar a las organizaciones humanitarias en la zona acceder el acceso a la ayuda enviada en situaciones de crisis, en línea con lo establecido por Naciones Unidas”.
A esto se suma que, el día 29 se anunció una “nueva fase de relaciones Unión Europea América Latina y el Caribe”, tras una reunión en Managua, que incluyó a representantes del régimen de Daniel Ortega.
La delegación europea informó que la reunión “ocurre luego de que el Consejo de la Unión Europea adoptara unas históricas Conclusiones sobre las relaciones entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe (ALC) en las que entre otros puntos importantes destaca que, aunando sus fuerzas, la UE y ALC pueden marcar una verdadera diferencia por lo que respecta a promover el crecimiento sostenible, construir sociedades justas y resilientes y fomentar la paz y la seguridad, el multilateralismo inclusivo y el progreso global”.
Al respecto, Castillo fue clara en asegurar que si estos anuncios significan “borrón y cuenta nueva, nosotros no lo vamos a permitir como pueblo nicaragüense”.
Flexibilización de sanciones al régimen en Nicaragua
La activista se refirió en primer lugar al tema de la flexibilización de sanciones, e indicó que “es muy importante leer el contexto en que el Consejo Europeo toma esta decisión”.
“Yo puedo imaginar que está motivada no por Nicaragua, sino fundamentalmente por el conflicto que se está teniendo en Oriente próximo y en otros países africanos”, manifestó.
Pero en el caso de Nicaragua, Castillo declaró: “Nosotros como actores sociales, actores económicos, políticos, humanitarios, de toda índole que estamos aglutinados en el Espacio de Diálogo y Confluencia de Actores Nicaragüenses nos sentimos en la obligación en la responsabilidad de recordarle a la Unión Europea que las circunstancias de Nicaragua tienen una particularidad… el caso de Nicaragua por muy insólito que parezca está peor que los terroristas de Hamás, porque en Nicaragua se aniquiló a la Cruz Roja, no existe ninguna organización humanitaria independiente, las pocas organizaciones no gubernamentales que sobreviven es porque han tenido que asumir todo lo que el régimen determina”.
“Señores recuerden en Nicaragua existe una dictadura. En segundo lugar, nosotros advertimos el peligro; pero si lo acabamos de ver con el caso del huracán Iota y Eta, la ayuda humanitaria nunca llegó”, recalcó.
Castillo reiteró que “todo recurso que llega a manos del régimen es usado a como ellos quieren, a como la familia y la pareja presidencial decide y efectivamente que su prioridad es fortalecer su tejido de represión”.
¿Nueva fase de relaciones Unión Europea y Nicaragua?
Sobre el anuncio de una “nueva fase de relaciones Unión Europea y Nicaragua”, Castillo expresó que pudiera ser que esto “obedece a que el embajador está dando seguimiento a una política exterior de la Unión Europea fijada en la Cumbre de la Unión Europea y la Celac”.
Sin embargo, –añadió—“nosotros tenemos una gran responsabilidad de poderle recordar todos los días, la coherencia necesaria”.
“Yo agarro y escribo un artículo en La Prensa y le digo al señor (Joseph) Borrel ‘lo que es bueno para el ganso, es bueno para la gansa’, tanto valen los muertos en Oriente próximo como nuestros muertos, y lo que están sufriendo los presos, las presas, los familiares, los jóvenes que murieron en abril”.
“Nosotros también llamamos a la coherencia porque él mismo reconoce que la paz no es algo que cae por sí sola, hay que construirla”, añadió.
“Le estamos diciendo a la Unión Europea, está bien hay un marco de relacionamiento regional para toda América Latina y el Caribe… (pero) decir, señores unas relaciones renovadas, si esto significa ‘borrón y cuenta nueva’, nosotros no lo vamos a permitir como pueblo nicaragüense, ni como actores políticos, sociales, de Derechos Humanos”, expuso.
Castillo recordó que el acápite 7 de la resolución de la UE “dice que todo esto debe ser en apego al respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales”. Algo que en Nicaragua no existe.