Destacados / Nacionales · 19/01/2024

Félix Maradiaga opina que Petro “está lejos de ser un mediador potencial” para Nicaragua

El excarcelado político y opositor nicaragüense Félix Maradiaga opinó que el Presidente colombiano Gustavo Petro “está lejos de ser un mediador potencial” para la crisis en Nicaragua, debido a sus “muy desgastadas” relaciones diplomáticas con el dictador Daniel Ortega.

El presidente Petro informó hoy que puso a disposición sus “buenos oficios” ante el Papa Francisco para mediar en la crisis con Nicaragua.

Colombia puede poner sus buenos oficios”, planteó Petro tras haber tenido una entrevista con el Papa Francisco en el Vaticano.

Petro ha señalado que aprovechando que Colombia y Nicaragua tienen que sentarse a negociar por orden de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) a razón de su disputa por aguas territoriales, este encuentro podría ser una “oportunidad” para hablar de “otros temas”, como la libertad religiosa en el país centroamericano.

Al respecto, Maradiaga sostuvo que “todo ofrecimiento de esa naturaleza es loable”; sin embargo, “no creo que tenga ningún efecto por varias razones”.

En primer lugar, Daniel Ortega ha mostrado un total desprecio a la comunidad internacional. No veo en Ortega ninguna apertura para dialogar de manera transparente y constructiva a través de mediadores del sistema interamericano. Ortega ya está enrumbado en un camino de radicalización hacia un sistema totalitario. Esto no significa que la comunidad internacional deba cesar en la búsqueda de espacios de mediación, especialmente cuando hay temas urgentes de derechos humanos, como el de los presos políticos y la libertad religiosa”, declaró.

Añadió que “el presidente Petro está lejos de ser un mediador potencial. No solo tiene relaciones muy desgastadas con Ortega en el nivel personal, sino que entre el estado de Colombia y Nicaragua ha habido querellas por temas territoriales que tensan mucho esa relación binacional. Parece que el presidente Petro expresa más un deseo que una propuesta seria. Lamentablemente no tiene la influencia diplomática regional necesaria en el espacio global”.

Para Maradiaga el tema de la persecución religiosa en Nicaragua “debería movilizar más atención internacional de forma urgente”.