Economía / Nacionales · 05/10/2021

Nicaragua: optimismo económico ¿realidad o ilusión?

El Banco Central de Nicaragua (BCN) espera un crecimiento económico del 7% para este año y si se logra sería la primera vez desde que el régimen de Daniel Ortega llegó al poder, en el que el producto Interno Bruto se expande a un nivel superior del 6%.

Hasta ahora y según los datos oficiales, esa era la mejor tasa reportada en casi 15 años.

Hace tres semanas, el sancionado presidente del BCN, Ovidio Reyes, informó que el PIB del primer semestre creció más del 9%, por lo que elevó la previsión de crecimiento para todo 2021 de entre 4 y 6 % a oscilar entre el 5 y el 7%.

“Ya observando estas cifras de crecimiento y la tendencia que está detrás de la misma nosotros podríamos hacer una estimación bastante gruesa de cómo podría finalizar el año… Y si nos vamos a la tendencia que nosotros creemos (que) podría tomar la economía en los últimos trimestres, de un 4%, finaliza la economía este año creciendo un 7%”, afirmó.

Sin embargo, dos entidades internacionales especializadas, la Unidad de Inteligencia Económica y la calificadora crediticia internacional S&P Global Rating, pronostican que la economía de Nicaragua crecerá 6.0% en 2021.

Ambas agencias advierten que buena parte de la razón de ese desempeño se explica en la profunda caída de 2020, pero también que los siguientes tres a cuatro años no serán tan buenos.

El economista y sociólogo Oscar René Vargas explicó a la Voz de América que la economía de Nicaragua pasa por un fenómeno popularmente conocido como el “efecto rebote”.

“Este crecimiento es como una pelota que cae y rebota, es decir, llegó hasta el fondo y rebotó, pero no logra superar la barrera de la economía del 2017. Es decir, estamos por debajo y vamos a estar por debajo del 2017. ¿Qué significa esto? Que no va a haber empleo suficiente, los salarios no se mejoran, la canasta básica sigue creciendo, la deuda familiar se mantiene”, explicó.

La última vez que la economía de Nicaragua alcanzó el 7% fue en 1999, un año después del huracán Mitch, según muestra el registro histórico del Banco Central de Nicaragua.

Mientras, el actual crecimiento se atribuye a un ambiente externo extremadamente favorable para las exportaciones, en combinación con la inyección de recursos por parte del Estado, pero seguirá siendo relativamente moderado en los próximos tres años dado el debilitamiento del entorno empresarial y el estancamiento político entre el régimen y la oposición antes de las elecciones generales de noviembre de 2021.