Un grupo de 44 nicaragüenses que llevaban más de cuatro meses varados en Guatemala intentan atravesar Honduras para regresar a Nicaragua en medio de las restricciones de movilidad por la pandemia del COVID-19.
Los nacionales lograron juntar dinero para alquilar dos buses que hoy salieron de la capital guatemalteca hacia la frontera con Honduras.
Entre el grupo, está Sayra Laguna, medallista olímpica centroamericana de judo y sambo de 32 años, que llegó a Guatemala en enero escapando de la difícil situación económica de Nicaragua y luego que fuera despedida de una institución del Estado por criticar al régimen de Daniel Ortega.
“Vamos a intentar salir por la frontera de Corinto. Vamos a llegar a Migración y pedir clemencia, vamos a explicar qué nos está pasando”, dijo la deportista. El grupo no tiene visas migratorias y a varios se les venció el permiso para entrar a Guatemala que dura tres meses.
Laguna al llegar en Guatemala logró conseguir trabajo como instructora en un gimnasio pero tras el estallido de la pandemia el local cerró, por lo que terminó haciendo labores de limpieza en casas particulares.
Laguna explicó que busca regresar a su país para estar con sus familiares, varios de los cuales están enfermos. Entre ellos su padre.
Según Laguna, la decisión de emprender el regreso por su cuenta fue tomada luego de que la embajada de Nicaragua no respondió su pedido de que les otorgaran un salvoconducto.
*Con información de AP