Nacionales · 27/01/2022

Nicaragüenses en Canadá piden mayor firmeza contra el régimen de Ortega

En semanas pasadas, ciudadanos, residentes y exiliados nicaragüenses radicados en Montreal, Toronto, Ottawa y Calgary enviaron una serie de misivas a la ministra canadiense de Relaciones Exteriores, Mélanie Joly, para agradecerle por su implicación en la Organización de Estados Americanos (OEA) y en la ONU en relación con “las graves y sistemáticas violaciones de los derechos humanos en Nicaragua”.

Creemos que Canadá ha hecho un buen papel, pero debe ser más firme”, dijo Bertha Garay, del colectivo Nicaragüenses Autoconvocados y Exiliados de Montreal, Canadá.

En concreto, pedimos a la ministra agotar los procedimientos establecidos por la Carta Democrática Interamericana de la OEA, exigir la liberación de los 150 presos políticos y crear un programa que permita a los ciudadanos opositores de Nicaragua venir a Canadá para obtener un estatus migratorio seguro”, señaló Garay.

Aunque los firmantes de las cartas no han recibido respuesta directa de la canciller canadiense, el medio local RCI solicitó respuesta a dichas demandas.

Geneviève Tremblay, portavoz del subministerio de Desarrollo Internacional del ministerio de Asuntos Globales, respondió la solicitud de comentario.

Tremblay recordó que el 10 de enero pasado, la ministra Mélanie Joly emitió una declaración sobre la “pretendida” investidura en Nicaragua en la que pedía la liberación inmediata de todos los presos políticos por parte del régimen.

También pidió al régimen que aceptara la misión de buenos oficios de la OEA para fomentar un diálogo nacional que condujera a la celebración de elecciones anticipadas, bajo observación internacional creíble, que fueran libres, justas y transparentes, y reiteró el llamamiento de Canadá para que el régimen tomara medidas para adherirse a los principios de la Carta Democrática Interamericana”, indicó Tremblay.

LA MIGRACIÓN

En lo referente a la migración, la representante del gobierno canadiense también dijo que Canadá participa activamente en los procesos mundiales y regionales para abordar “los retos relacionados con la migración y el desplazamiento forzado”.

Por ejemplo, dijo la señora Tremblay, la implicación canadiense en ese sentido se lleva a cabo a través de la OEA, los Pactos Mundiales, la Conferencia Regional sobre Migración con Centroamérica y México, y la presidencia de Canadá de la Plataforma de Apoyo al MIRPS (el Marco Regional de Protección y Soluciones Integrales).

Nuestro objetivo es conseguir la ayuda para que estos países necesitan para gestionar mejor los retos a los que se enfrentan en términos de desplazamiento forzado y migración, ya sea apoyo financiero, técnico o político”, dijo la portavoz del gobierno canadiense.

Según ella, Canadá quiere lograr movilizar a las naciones para que refuercen sus sistemas de protección, tal y como se indica en los planes de acción sobre migración a nivel nacional.

Canadá se ha comprometido a trabajar con otros Estados para reforzar los sistemas de protección, promover una migración segura y ordenada y abordar las causas profundas que hacen que las personas abandonen sus hogares, como la delincuencia, la pobreza y la violencia”, manifestó.

IR AÚN MÁS ALLÁ

En noviembre del 2021, la ministra canadiense de Relaciones Exteriores, Mélanie Joly, anunció la imposición de sanciones contra otras 11 personas en virtud del Reglamento de Medidas Económicas Especiales en respuesta a las continuas violaciones de los derechos humanos en Nicaragua.

La nicaragüense-canadiense Bertha Garay saluda este tipo de pronunciamientos y acciones por parte del gobierno de Canada. Sin embargo, cree que si la crisis de los derechos humanos continúa como hasta ahora en Nicaragua será necesario que Canadá se muestre aún más firme.

Pediríamos, por ejemplo, el retiro de la representación diplomática canadiense en Nicaragua, como lo hizo Gran Bretaña. Y alentaríamos al gobierno de Justin Trudeau a tomar medidas más enérgicas como sancionar las instituciones y no solamente a las personas, como Canadá lo ha hecho hasta ahora. Son las instituciones, como el Ejército, las que se han prestado a perpetrar las violaciones de los derechos humanos que han sido documentadas”, zanjó.