Nacionales · 26/07/2021

Nicaragüenses se verifican en medio de más secuestros

Nicaragua vivió el fin de semana el proceso de jornada de verificación ciudadana, una de las actividades más importantes establecidas en el calendario electoral, la cual consiste en que la población constate si está habilitada para votar en las elecciones presidenciales previstas para el próximo 7 de noviembre.

Olivia Miranda Padilla, una señora de casi 90 años, acudió a una de las urnas más cercanas a su casa. La ciudadana nicaragüense, que estuvo un buen tiempo en Venezuela, denunció que en la Junta Receptora donde antes aparecía registrada fue desaparecida. Lo mismo ocurrió con al menos 100 centros de votaciones más, según la oposición del país.

Las autoridades electorales alegan que esto se debe a que supuestamente se han habilitado los centros públicos que ofrecen mejores condiciones a la población, sin embargo, hay quienes consideran que esto tiene como fin el centralizar los votos el día de los comicios.

“Nos están obligando a todos a verificarnos. Antes me tocaba en otro punto, pero tuve que venir hasta aquí, ¿quién me pagará por venir hasta aquí o que vaya a adquirir el virus? Donde votaba ya no estoy”, dijo Miranda visiblemente molesta.

“Ojalá Dios quiera que pronto salgamos de este parto porque estamos derramando sangre por gusto”, añadió la mujer en referencia a la crisis que vive el país desde hace más de tres años.

Según datos oficiales, hasta inicios de julio unos 4 millones de nicaragüenses estaban habilitados para acudir a las urnas en los comicios de este año, los cuales están marcados por una de las crisis políticas más graves de los últimos años.

Iglesia participó en verificación

Altos jerarcas de la Iglesia también acudieron al llamado del Poder Electoral para verificar y constatar cualquier anomalía en el proceso electoral, tal y como lo hizo el sacerdote Edwing Román, una de las personas más emblemáticas del país durante las protestas antigubernamentales en 2018.

Román comentó a la Voz de América que a su juicio, aunque “no hay condiciones en Nicaragua para las elecciones” debido a “una cantidad de presos políticos, entre ellos los posibles candidatos, sí se ha dado esta fecha para que nos verifiquemos y hay que hacerlo. Es un deber y un derecho”.

Mientras tanto, el dictador Daniel Ortega, que acudió a un centro de verificación en horas de la tarde del domingo, y aprovechó el espacio para acusar a Estados Unidos de supuestamente tener pretensiones de desconocer las elecciones de noviembre.

Ortega, dijo que países como Venezuela y Cuba “han sabido vencer las agresiones del imperio” y señaló que “así también estamos luchando es una batalla común de los pueblos”.

“¿Cuántas elecciones han habido en Venezuela? Ganadas limpiamente, pero como no ganan los peleles de los yanquis, entonces no las reconocen y han llegado al extremo de inventar a un pelele que anda paseándose por todos lados, haciendo el ridículo porque se presenta como presidente de Venezuela”, dijo Ortega en referencia al líder opositor Juan Guaidó.

Observación internacional en jaque

Las elecciones en Nicaragua de noviembre están marcadas por el arresto de siete aspirantes a la presidencia en virtud de polémicas leyes ejecutadas contra opositores.

Las detenciones más recientes sucedieron este sábado. La Policía Orteguista secuestró al comentarista político Jaime Arellano y al precandidato presidencial Noel Vidaurre, a quienes se investigan por supuestamente cometer actos “que menoscaban la independencia, soberanía y autodeterminación” de Nicaragua, al igual que ha ocurrido con el resto de los opositores.

La comunidad internacional y varios países como Estados Unidos han pedido un proceso electoral “libre y transparente”, así como observadores reconocidos, sin embargo algunos funcionarios orteguistas consultados por la VOA han dicho que esta decisión aún no está tomada.

“Todavía estamos en eso, no se ha decidido, en cualquiera de los casos los grandes observadores vamos a ser nosotros mismos”, dijo a la VOA el vicepresidente del Poder Electoral, Cairo Amador, tras hacer un recorrido por un centro de verificación ciudadana establecido en la capital nicaragüense.

*Con VOA