El grupo de 44 nicaragüenses que permanecen varados en la frontera de Guatemala con Honduras fueron atendidos este jueves por la Cruz Roja guatemalteca, ACNUR y líderes religiosos que les dieron alimentos y víveres a los ciudadanos que esperan que las autoridades migratorias de Honduras y Nicaragua les autoricen su ingreso a dichos países.
Los nicaragüenses cumplen 24 horas en la frontera de El Corinto entre Guatemala y Honduras, allí las autoridades migratorias hondureñas les impidieron continuar a falta de documentación especial requerida por la pandemia del COVID-19.
La portavoz del Instituto Guatemalteco de Migración, Alejandra Mena, aseguró que Honduras está exigiendo “un permiso que está proporcionando Nicaragua para darles ingreso y que puedan continuar el tránsito hacia su país”.
En el grupo hay una mujer embarazada y una menor de edad. Entre los migrantes también se encuentra, la atleta Sayra Laguna, deportista doble medallista de judo y sambo en los Juegos Centroamericanos 2017, quien se encontraba en Guatemala y pretende retornar a su país porque su papá está enfermo.
Los nicaragüenses esperan que Nicaragua autorice su ingreso, pero se les exige una prueba negativa de COVID-19 para iniciar los trámites.
“Honduras nos retiene, porque no tenemos un listado y una carta firmada y sellada por la embajada de Nicaragua en Guatemala y eso es un atraso”, explicó Laguna, según VosTV.
Los nicaragüenses además necesitan un permiso por parte de las autoridades de Honduras para poder transitar por este país, el cual también debe ser solicitado por la embajada nicaragüense.
Los nicaragüenses solicitaron al presidente de Guatemala, Alejandro Giamattei, que les ayude a regresar a Nicaragua y que se les realice la prueba de COVID-19.