Nacionales · 26/05/2022

Organizaciones opositoras convocan a acciones cívicas de resistencia contra la dictadura Ortega-Murillo

Más de 55 organizaciones de la sociedad civil y opositoras dentro y fuera de Nicaragua, integrados en el ‘Espacio Plural de Diálogo de Actores Nicaragüense’, convocaron este jueves a diversas acciones cívicas y pacíficas de “resistencia activa” contra la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, debido al “recrudecimiento de la agresión contra el pueblo” nicaragüense.

Entre las acciones se incluye el paro de consumo progresivos de combustible, disminuir drásticamente el consumo de energía eléctrica, demandar a los gobiernos socios del BCIE el retiro de fondos que financian la represión, y unirse a una jornada de ayuno y oración por la liberación de los presos/as políticos y en solidaridad con los sacerdotes perseguidos en Nicaragua.

Ante el recrudecimiento de la agresión contra el pueblo creyente y no creyente, afectado por la falta de acceso a los alimentos, el desempleo y subempleo, el incremento de los impuestos, la migración forzada, la corrupción, intranquilidad, inseguridad y violencia, convocamos a manifestarnos a través de las siguientes acciones cívicas y pacíficas, con resistencia activa como parte de nuestro derecho a protestar y rebelarnos”, expresaron las organizaciones, entre las cuales hay excarcelados políticos, familiares de presos políticos, exiliados y diáspora.

Dentro de Nicaragua, las organizaciones convocan a “suspender el ingreso económico que la dictadura usa para la represión”, a través de “paros de consumo progresivos de combustible todos los miércoles de cada semana iniciando decididamente este 1ro de junio del año 2022”.

También invitaron a la “jornada ‘Yo apago una bujía’ para disminuir drásticamente el consumo de energía eléctrica en cada una de nuestras casas, oficinas, negocios y fábricas por ser uno de los negocios de la dictadura”.

Asimismo, “consumir solo productos de primera necesidad, postergando los asuntos suntuarios para hacer frente a semejante crisis económica y debilitar los negocios del régimen”.

Las organizaciones también pidieron al pueblo de Nicaragua “expresar la solidaridad con las madres que perdieron sus hijos en la masacre del 30 de mayo de diferentes maneras y en cada familia, incluyendo el regalo de una flor extra a las madres nicaragüenses”, y “fortalecer creativamente y en silencio la organización y articulación interna del pueblo en resistencia activa”.

En el caso de la diáspora y el exilio, se convocó a “continuar fortaleciendo su presencia y solidaridad, presionando a los organismos internacionales que financian al régimen” a través de “demandar a la comunidad internacional la creación de un mecanismo efectivo para exigir la liberación inmediata y sin condiciones de todas las personas secuestradas por el régimen que están en inminente peligro de muerte”.

Además de “organizar visitas presenciales, en los primeros quince días del mes de junio, ante los gobiernos socios del BCIE para demandar retiro de fondos que financian la represión”.

Igualmente, “llevar un solo mensaje a la Cumbre de las Américas para posicionar los derechos humanos como el centro de preocupación del pueblo y de los gobiernos del continente y para que reconozcan la ilegitimidad de la dictadura Ortega Murillo y actúen en consecuencia”.

Demandar la profundización y ampliación de todos los mecanismos de presión con los que cuenta la comunidad internacional para reencauzar la democracia en Nicaragua”, añadieron.

Y, “organizar y participar en La Jornada Mundial de Ayuno y Oración en distintas ciudades del mundo con presencia de nicaragüenses durante el mes de junio en demanda de la liberación de los presos/as políticos y en solidaridad con Mons. Rolando Álvarez y con todos los párrocos perseguidos por la dictadura”.