La justicia de Daniel Ortega en un arranque de venganza contra monseñor Rolando Álvarez, lo sentenció a 26 años y 4 meses de prisión, al declararlo “culpable” de diversos falsos delitos.
El magistrado orteguista Octavio Rothschuh Andino, presidente de la Sala Uno del Tribunal de Apelaciones de Managua (TAM) leyó la sentencia en contra del obispo.
Álvarez, quien ayer no aceptó ser desterrado de su país, también fue despojado de su nacionalidad nicaragüense.
“Téngase al acusado Rolando José Álvarez Lagos como traidor a la patria. Declárese culpable al acusado Rolando José Álvarez Lagos por ser autor de los delitos de menoscabo a la integridad nacional, propagación de noticias falsas a través de las tecnologías de la información y la comunicación, obstrucción de funciones, agravada desobediencia o desacato a la autoridad en perjuicio de la sociedad nicaragüense y el estado de la República de Nicaragua”, leyó Rothschuh.
“Condénese al acusado Rolando José Álvarez Lagos a la pena de 15 años de prisión e inhabilitación de forma perpetua para ejercer la función pública, así como a ejercer cargos de elección popular. Del mismo modo se declara la pérdida de los derechos ciudadanos del condenado, misma que tendrá carácter perpetuo”, agregó.
“Se declara la pérdida de la nacionalidad nicaragüense al sancionado Rolando José Álvarez Lagos en estricto apego a la ley”, continuó el magistrado orteguista.
El obispo también fue condenado a 5 años de prisión y 800 días multa por “ser autor del delito de propagación de noticias falsas. La pena en días multas equivale a la cantidad de 56,461.15 córdobas”, detalló Rothschuh.
Asimismo, fue sentenciado a 5 años de prisión y 4 meses de prisión por “ser del delito de obstrucción de funciones agravada” y a 1 año de prisión por “ser autor del delito de desacato a la autoridad”.
En total dijo el magistrado son “26 años de prisión y cuatro meses” de prisión. Álvarez saldría de la cárcel en el 2049, finalizó.
Se desconoce si el obispo fue llevado a escuchar su sentencia.