Destacados / Nacionales · 02/02/2023

Periodistas independientes hablan a cerca del anonimato y autocensura de las fuentes en Nicaragua

Periodistas independientes de la alianza 4Mi – Cuatro Medios Informando en colaboración, integrada por La Mesa Redonda, Galería News, República 18 y Boletín Ecológico, hablaron este jueves sobre el anonimato y la autocensura de las fuentes en Nicaragua, un desafío con el que las diferentes plataformas informativas se han encontrado a causa de la criminalización de las voces críticas en el país por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

Esta semana, 4Mi realizó y publicó la nota periodística: “Credibilidad de los medios digitales a buen resguardo a pesar de que en Nicaragua las fuentes tienen temor de informar”. En ella se pone de manifiesto que el temor de la ciudadanía nicaragüense a hablar sobre algún tema en particular en los medios independientes y cuando sí lo hacen los entrevistados te condicionan “no pongás mi nombre”, o te solicitan decir que son hombres en lugar de mujeres y viceversa, o simplemente decir “una persona” sin especificar el sexo.  

El temor de las fuentes es comprensible. Nicaragua es un país donde hablar en contra de la dictadura es considerado un “delito”. Pero ese miedo va más allá de los temas políticos, incluso para asuntos económicos y sociales algunas personas prefieren no opinar o solicitar anonimato.

La periodista Martha Irene Sánchez, directora de República 18, señaló que en el periodismo independiente nicaragüense, tanto como el que sigue ejerciendo dentro de Nicaragua como el que está en el exilio forzado, “hay mucha voluntad y compromiso” y pese a esos obstáculos “nadie ha abandonado” su deber de informar. Por el contrario, –dijo– “hemos renovado nuestro compromiso por la verdad, por la lucha y la defensa de las libertades públicas”.

Sánchez subrayó que en el periodismo independiente se plantean una serie de “desafíos y amenazas a nuestro ejercicio y sin duda una de ellas es ejercer en circunstancias tan difíciles” como las que existen en Nicaragua a partir de la crisis de 2018.

En el pleno del ejercicio mismo por toda esa política de terror que se ha implementado desde el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, hemos visto cómo muchas de nuestras fuentes informativas han optado primero por el silencio y segundo por el anonimato. Porque sabemos que toda esta política de terror ha llevado a la criminalización de todo lo que es considerado por el régimen una voz disidente o crítica, o que simplemente piensa diferente”, apuntó la periodista exiliada en Costa Rica.

La periodista Abigail Hernández, directora de Galería News, coincidió con “el estado de terror que se vive en Nicaragua” y que a su juicio “está teniendo repercusiones en el ejercicio periodístico, sobre todo en lo que se refiere a la accesibilidad de fuentes de opinión”.

Hay dos situaciones. Las personas que te dicen ‘mirá está pasando esto, pero no te puedo dar declaraciones porque me pueden encarcelar’. También en el exilio hay algún temor de las personas a dar información de determinados temas. Hoy en día te podés encontrar con personas que te dicen ‘mirá en aquel momento yo te di la entrevista, pero por favor retirá el trabajo’. A todo ese tipo de situaciones nos estamos enfrentando producto de la repercusión del estado de terror que se vive no solo dentro de Nicaragua, sino en las comunidades en el exilio en distintos países”, afirmó.

Hernández alertó que “este terror está evitando y afectando la denuncia en cuanto a violaciones de Derechos Humanos” cometidas en Nicaragua.

Cuando esto ocurre el gran peligro es que todos los delitos puedan quedar en impunidad. Este silencio al que nos estamos enfrentando los y las periodistas debemos como gremio empezarlo a sonar y a denunciarlo internacionalmente”, exhortó.

Por su lado, el periodista David Quintana, director de Boletín Ecológico, aseguró que son los supuestos “adeptos” al régimen y periodistas sandinistas los que filtran la información a los medios independientes.

Los que ellos (régimen) supuestamente controlan son nuestras fuentes informativas”, aseveró Quintana.

El periodismo independiente sigue resistiendo y haciendo su trabajo; y la labor más genial que pueda existir es que periodistas que están adeptos a la dictadura son los mismos que nos están solicitando pode publicar lo que está sucediendo con ellos”, añadió.

En ese sentido, mencionó el caso del exfuncionario del Poder Judicial, Roberto Larios. “Los mismos periodistas sandinistas me han pedido ayer publicar que él (Larios) tiene cinco meses de estar en ‘El Chipote’ y no ha sido trasladado. Eso dice mucho de la credibilidad que hay en nuestras plataformas informativas”, anotó.

El periodista Sergio Marín Cornavaca, director de La Mesa Redonda, destacó que “existe una voluntad inquebrantable de las y los periodistas que forman parte de las plataformas para seguir con su trabajo cotidiano”.

Y aclaró que “tratarnos como mercenarios de la información es una verdadera mentira”.