Organizaciones que integran la Plataforma de Unidad por la Democracia (PUDE), señalaron este miércoles que “hay necesidad de una vocería colegiada” y de “un equipo que salga a tocar las puertas a nivel internacional” para visibilizar la crisis sociopolítica en Nicaragua de cara a sacar del poder a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Jonathan Duarte, miembro de PUDE, Enrique Martínez de la Unidad Juvenil Estudiantil (UJE), y Manuel Prado de la Fundación Nicaragüense Americana para el Desarrollo, Educación y Cultura (FUNADEC), expresaron en entrevista con La Mesa Redonda que dicha plataforma –integrada por al menos siete organizaciones opositoras nicaragüenses–, ha reconocido el liderazgo de las juventudes, respeta la identidad de cada organización y no se rige por burocracias, en cambio tiene “intereses colectivos urgentes” como luchar contra la dictadura Ortega-Murillo.
Prado destacó la unidad en acción de diversas organizaciones en la demanda de liberación de presos políticos, el rechazo a la reelección de Dante Mossi como Presidente del BCIE, y más recientemente la petición que hicieron para que Estados Unidos aplique la Ley Renacer a la dictadura Ortega-Murillo.
¿Cómo concibe la unidad PUDE?
Duarte aseguró que la unidad “se ha venido dando orgánicamente. Un ejemplo perfecto de esa unidad en acción en diferentes sectores de la oposición es la Cumbre de las Américas. Se logró tejer una narrativa común, llegaron representantes de todas estas organizaciones hablando el mismo lenguaje, con una estrategia bien definida y fue un éxito total. Si continuamos trabajando en esas alianzas estratégicas y la unidad en acción, creo que podemos seguir caminando de manera positiva”, dijo.
Agregó que “hay necesidad de una vocería colegiada, de liderazgo para representarnos particularmente a nivel internacional y que es urgente. Hay varias propuestas de cómo llegar a ese grupo colegiado y estamos abiertos a apoyar las iniciativas que están surgiendo en este momento de los liderazgos más visibles que acaban de salir de las mazmorras de Ortega”.
Por su parte, Martínez destacó que para la unidad “se deben respetar las identidades organizacionales, los lineamientos estratégicos”, sin embargo, “hay un factor que nos conecta, el tema de la narrativa”.
“Últimamente se ve una mayor articulación de los mensajes que estamos mandando, la forma en la que se están posicionando. Esos hilos que nos interconectan a cada uno de nosotros son ese pilar de unidad que tal vez no es visible”, comentó.
“Es urgente de buscar cómo articular un órgano colegiado que presente y traslade los mensajes de la oposición como tal, sin embargo, hay que recordar los errores del pasado y nos señalan que hay que bajar ciertas turbulencias que todavía existen, sobre todo el tema de cómo se reasientan los liderazgos de las personas que recientemente salieron de las cárceles de la dictadura (…) Queremos hacer algo que duradero en el tiempo y nos permita dar golpes cruciales contra el régimen”, continuó Martínez.
Prado de origen miskito, declaró que “lamentablemente” existe una falta de información”, pero que “sí estamos trabajando”.
“Tal vez no lo anunciamos, tal vez no se publica, pero hemos tenido éxito, todos estamos sumando y estamos viendo resultados que antes no los veíamos. No queremos anunciar nuestros pasos, no lo vamos a hacer, estamos aprendiendo de los errores del pasado y estamos viendo los resultados hoy en día”, aseveró.
Prado añadió que “nos urge un equipo que salga a tocar las puertas, a dar esa visibilidad porque Nicaragua se va a perder en el marco internacional si no tomamos acciones hoy, pero también no podemos descalificar a la población que quiere elegir una vocería, está bien hagamos las dos (acciones). Pero lo que no podemos hacer es quedarnos de brazos cruzados en medio de una burocracia que no permite avanzar. Intentemos de todo y lo que pegue pegue, ahorita lo que nos urge es la liberación de nuestra patria”.
“Queremos ver una gran unidad, queremos ver líderes elegidos, el tiempo llegará”, finalizó.