La periodista Kalúa Salazar, jefa de prensa de radio La Costeñísima de Bluefields, denunció a través de sus redes sociales que la madrugada de este lunes la Policía Orteguista de esa localidad le impidió salir de su casa hacia su lugar de trabajo e incluso que un antimotín la golpeó y trató de robarle su celular.
“Estaba saliendo para la radio, una camioneta de policía no me deja salir de mi casa, un antimotín me golpeó y no me dejan salir de casa, están revisando a mis compañeros de trabajo. Todo esto pasó a vista de mi mamá y mis hijas”, escribió la periodista en su cuenta de Twitter.
A través de un Facebook Live, Salazar denunció el asedio policial del cual es víctima en su casa.
Al respecto, la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos (IM-Defensoras) alertó que la Policía “atentó contra la vida” de la periodista.
“Ha sido atacada por uno de los policías, quien la ha golpeado fuertemente e, incluso, ha tratado de estrangularla ante la presencia de sus hijos y su mamá, hasta el punto que una mujer policía ha tenido que intervenir para detener la agresión. Seguidamente, el mismo policía agresor ha tratado de sustraer el celular con el que Kalua ha grabado la agresión. Al lugar ha llegado otra furgoneta de la policía, de la que han descendido más agentes, uno de los cuales ha comenzado a grabar a la periodista a la puerta de su domicilio, en actitud intimidante”, detalló el organismo.
“Desde la IM-Defensoras condenamos este grave atentado contra la periodista Kalua Salazar, así como el asedio, intimidación y amenazas constantes que están viviendo ella y su familia. Exigimos el cese inmediato de estas agresiones y hacemos responsable al Gobierno de Nicaragua de cualquier vulneración a la integridad de Kalua Salazar y su familia”, demandó.
La ONG reiteró su llamado a la comunidad internacional para que “se mantenga vigilante de los acontecimientos en Nicaragua, especialmente en el marco de la conmemoración del estallido social de 2018, y se solidarice con las organizaciones, movimientos sociales, activistas y personas defensoras de derechos humanos que alzan su voz contra los abusos autoritarios y las violaciones sistemáticas de derechos humanos por parte del gobierno”.
Mary Lawlor, relatora especial de la ONU para la situación de los defensores de derechos humanos, se refierió a la agresión policial contra la periodista Kalúa Salazar. «Las personas defensoras deben poder realizar su trabajo sin intimidación cualquiera», afirmó.
