*Por Voces en Libertad
Con un viacrucis el pasado sábado, la diáspora nicaragüense cerró las actividades que se realizaron durante la sesión de las Naciones Unidas
La Organización de las Naciones Unidas, dio por finalizada el pasado sábado la sesión número 77, en donde la situación en Nicaragua estuvo en la palestra. La actividad reunió a decenas de exiliados, presos políticos, defensores de derechos humanos, a varias “Madres de Abril” que siguen exigiendo justicia por sus hijos.
Durante las sesiones varios presidentes mencionaron el tema de Nicaragua, abogaron por los presos políticos y pusieron en el ojo público mundial la situación de graves violaciones a los derechos humanos que ha ejecutado el régimen de Daniel Ortega en el país.
La diáspora en Nueva York y Nueva Jersey, han sumado esfuerzos para que la situación de Nicaragua sea visibilizada ante el mundo. Así mismo la mesa de trabajo Nueva York-Nueva Jersey, nicaragüenses en el exilio, el Grupo Malinche y Nicaragua Colition.
La CPDH y El Colectivo Nicaragua Nunca Más, viajaron desde Costa Rica para ser parte de esta sesión y denunciar los abusos que se continúan dando en la tierra de lagos y volcanes.
Estas organizaciones promovieron foros y presentaron sus testimonios de los abusos que se cometen en Nicaragua.
“En lo que va del año, han sido ilegalizadas 1, 800 Oenegés, de ellas 29 tienen carácter religioso. Hoy, en un contexto marcado profundamente por el abuso de poder por parte del régimen nicaragüense, retomando las palabras de monseñor Oscar Arnulfo Romero, asesinado por denunciar las injusticias, pedimos y exigimos que cese la represión, que cese la persecución contra la iglesia y que sean liberados los sacerdotes, diáconos y seminaristas privados de su libertad, pedimos también por la liberación de todas las personas presas políticas en Nicaragua”, exaltó Juan Carlos Arce del Colectivo Nicaragua Nunca Más.
La oración debe unir a los nicaragüenses
Luego de oficializar la misa el padre Bismarck Chau, rector de la Catedral Basílica del Sagrado Corazón, en Nueva Jersey, se unió a los nicaragüenses que participaron de un viacrucis que se realizó en los alrededores de esta iglesia, el cual estuvo encabezado por la cruz, la bandera de Nicaragua, así mismo muchos de los nicaragüenses portaban velas.
“Fue una idea de la mesa de trabajo, la diáspora en Nueva York – Nueva Jersey, de concluir todas estas actividades que han pasado esta semana, de las reuniones de en las Naciones Unidas, para verdaderamente cerrar con un tiempo de oración para el pueblo de Nicaragua, reunir a todos los nicaragüenses de Nueva York – Nueva Jersey que se han estado pronunciando estos días, especialmente a las Naciones Unidas para que los pueblos del mundo puedan escuchar nuestro clamor, escuchar al pueblo nicaragüenses, a la diáspora nicaragüense y a todos los que estamos exiliados, a que miren lo que está pasando en nuestros país con el régimen Ortega-Murillo”, expresó Chau.
A partir de la situación sociopolítica del 2018, Chau cuenta que fue cuando empezó a conocer a más nicaragüenses radicados y exiliados en este estado. “La comunidad nicaragüense es grande, no puedo decir un número de cuantos están aquí, pero estoy muy bendecido por haber conocido a muchos de ellos en estos tiempos”, añadió.
La actividad que realizaron desde esta iglesia tuvo que ver con el panorama religioso de los obispos que han sido atacados por el régimen.
“Ahora mismo la iglesia está siendo atacada y ésto ha tocado mucho a nosotros los nicaragüenses, viniendo de una fe católica, siendo un país católico, no entiendo a este gobierno que sacó a las hermanas de la caridad Madre Teresa de Calcuta, un trabajo hermoso que han venido haciendo con las mujeres en Nicaragua, sacarlas, ¿por qué razón?”, expresó.
Chau al ser consultado sobre la posibilidad de un exilio forzado del obispo Rolando Álvarez, el religioso manifestó: “Ojalá que no, no creo que monseñor acepte dejar Nicaragua, aunque si el Papa le dice: ‘sal por tu protección’, él puede decir que no, no sé si será obediente al Papa, tal vez, pero en mi corazón algo me dice que monseñor se queda para luchar por Nicaragua, para decir no, de aquí esta voz no sale, él está en mis oraciones, así como todos los sacerdotes que han sido acusados falsamente”.
El obispo Chau, considera que la situación actual de la iglesia es peor que en los años 80, “yo estaba para entonces en un grupo juvenil, pero ésta es peor, la persecución que la iglesia está viviendo en estos momentos, no dejarte hacer procesiones, no llegar y congregarte a celebrar la eucaristía, es algo que no tiene sentido, es algo mucho peor de lo que vivimos en los años 80.
“Actos de agresión”
Durante su discurso en el 77 Período de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, tildó las sanciones contra funcionarios corruptos y acusados de crímenes de lesa humanidad como actos de agresión.
En su discurso, al mejor estilo de la vocera del régimen Rosario Murillo, Moncada saludó su hermanamiento con supuestas naciones que luchan contra el “imperialismo capitalista”, uno de ellos Irán, cuya población desde la semana pasada salió a protestar contra el régimen religioso de los ayatolas, tras la muerte de una enfermera en custodia de la policía.
“El infierno que viven los nicaragüenses”
La Asamblea General de las Naciones Unidas, que acogió la semana pasada a representantes de los 193 estados que la conforman, debió convertirse en un escenario para denunciar con mayor énfasis la grave crisis de derechos humanos que vive Nicaragua, afirmó la exembajadora argentina ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Paula María Bertol.
En Nicaragua hay al menos 205 presos políticos que están detenidos desde hace más de un año en aislamiento y sin posibilidad de defensa. El régimen Ortega y Murillo mantiene una política de censura.
“A mí me pareció muy conmovedor que (Gabriel) Boric (de Chile) resaltara en su discurso el tema de las violaciones de los derechos humanos de Nicaragua. Me gustó mucho que (Jair) Bolsonaro (de Brasil) abra las puertas para los curas y monjas en Brasil. Más allá de que parece muy ambicioso, acá están 193 países que conviven y me parece que es una luz, no mucha por supuesto, porque me hubiera gustado que otros presidentes plantearan el tema gravísimo de lo que ocurre en Nicaragua”, dijo la exdiplomática.
El mandatario chileno, Gabriel Boric, se refirió a la situación de Nicaragua con la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Boric instó a “seguir trabajando para contribuir a la liberación de los presos políticos” en ese país centroamericano.
El presidente brasileño Jair Bolsonaro, durante su ponencia defendió también la libertad de expresión y el derecho de toda persona de practicar libremente su orientación religiosa. “Brasil abre sus puertas para acoger a los padres y monjas católicas que han sufrido persecución del régimen dictatorial de Nicaragua”, dijo Bolsonaro.