El pronunciamiento lanzado el pasado 25 de enero por familiares de presos políticos que piden al dictador Daniel Ortega “encabezar”, junto con otras fuerzas políticas y la Iglesia católica de Nicaragua, un proceso de “unificación ciudadana” para la liberación de todos los secuestrados, alcanzó este lunes el respaldo de más familias, totalizando a familiares de 100 presos políticos, de los 170 que hay en las cárceles del país.
“En total tenemos familiares de 100 presos políticos”, apuntó el grupo de familiares vía WhatsApp, señalando que acogen a “todas las familias que deseen unirse a esta iniciativa en la búsqueda por la liberación de nuestros familiares”.
El documento reza: “Apelamos a los gobernantes y a las fuerzas vivas de la nación, así como a nuestra Iglesia para que encabecen y apoyen un proceso de unificación ciudadana, dispuestos a construir puentes; dispuestos a escucharnos los unos a los otros para así comenzar a desarmar la desconfianza mutua que por siglos nos ha dividido”.
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“Llanamente hacemos nuestro llamado a esta tarea constructiva por amor profundo a nuestros presos, pero que no quepa la menor duda de que también nos mueve un serio compromiso con la patria, para la cual deseamos más esperanza y menos angustia en todas sus esferas – espiritual, económica, cívica, social, y política”, agrega el texto.
El pronunciamiento expresa que la “libertad de nuestros presos no es un asunto de preferencias partidarias ni es una maniobra en una lucha por el poder. Su liberación, más bien, se puede ver como el paso inicial en un proceso que conlleve un mayor grado de serenidad para los hogares nicaragüenses, dentro y fuera de nuestras fronteras; y que ayude gradualmente a reducir grietas en nuestra sociedad”.