Este viernes arreciaron las protestas en varias ciudades al norte de Honduras para exigirle al gobierno central que les provea de alimentos y volver a la cuarentena para evitar la propagación del COVID-19.
Los manifestantes quemaron llantas y pusieron barricadas en los accesos al sector López Arellano, debido a que las autoridades no les cumplieron con la dispensa de los “sacos solidarios”.
“Nos dijeron que vendrían a las 7:00 am y no vino nadie, tenemos hambre” dijo uno de los protestantes. “No nos va matar el virus sino el hambre”, agregó.
Elementos policiales llegaron a la zona para disipar la protesta y controlar el saqueo a un supermercado y otros comercios de la zona. Además incendiaron un vehículo que circulaba en las cercanías.
Las manifestaciones en varios sectores de Choloma, como López Arellano y Quebrada Seca, inició el jueves para exigir alimentos y productos básicos.
Cortés, el epicentro de contagio del COVID-19 en Honduras, reporta hasta este viernes 265 casos confirmados y de ellos 16 pacientes perdieron la vida.
La operación “Honduras Solidaria”, que entregará 800,000 raciones de alimento a la misma cantidad de familias aún no llegó a Choloma, insistieron los manifestantes.
Honduras registra 23 personas fallecidas por causa de la enfermedad y 382 casos confirmados y siete recuperados.
Con información de La Tribuna