Destacados / Nacionales · 14/12/2022

Rechazan acusación contra el obispo Rolando Álvarez

Organismos defensores de Derechos Humanos, activistas y religiosos rechazaron las falsas acusaciones contra monseñor Rolando Álvarez, obispo de la diócesis de Matagalpa, administrador apostólico de la diócesis de Estelí, quien fue presentado por primera vez después de casi cuatro meses de secuestro.

El obispo Rolando Álvarez, fue acusado anoche 13 de diciembre por los falsos delitos de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional” y “propagación de noticias falsas en perjuicio del Estado y la sociedad nicaragüense”, según una nota del Poder Judicial orteguista.

“Este martes 13 de diciembre del año 2022, en los Juzgados de Distrito Penal de Audiencia de Managua, se admitió acusación presentada por el Ministerio Público por cumplir los requisitos procesales en contra de Rolando José Álvarez Lagos”, indicó la Dirección de Prensa del Complejo Judicial de Managua, a través de una declaración pública.

El Poder Judicial orteguista, le nombró un defensor de oficio al obispo Álvarez, le decretó “arresto domiciliario” y programó audiencia inicial para el 10 de enero de 2023.

Al respecto, el obispo Silvio Báez, señaló que “es un crimen lo que hace la dictadura de Nicaragua contra mi hermano obispo, Mons. Rolando J. Álvarez. Ultrajándolo se condenan a sí mismos. ¡Rolando, no estás solo! Estamos contigo, rezamos por ti y exigimos tu libertad. Contigo está Dios, quien no abandona a sus profetas”.

El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, repudió “la acusación infame” en contra de monseñor Rolando Álvarez y del sacerdote Uriel Antonio Vallejos, a quien el régimen giró oficio a la Interpol para su captura.

Obispos y sacerdotes han sido blancos de ataques desde 2018 cuando fueron golpeados y obligados al exilio como monseñor Silvio Báez, el padre Edwing Román y otros sacerdotes, mientras que otros religiosos han sido condenados o guardan cárcel esperando juicios con acusaciones falsas. Exigimos el cese de estas graves violaciones de derechos humanos, en particular la libertad religiosa, que persiguen callar, dar cárcel, exilio o cementerio contra un pueblo que merece libertad, verdad y justicia”, indicó el Colectivo en una declaración.

Demandamos el cese de la represión, la derogación de todas las leyes represivas, la libertad de monseñor Álvarez y de las más de 235 personas presas políticas en Nicaragua”, añadió.

Monseñor Álvarez, de 56 años, se convierte es el primer obispo arrestado y acusado desde que Ortega retornó al poder en Nicaragua en 2007.

El obispo fue sustraído la madrugada del viernes 19 de agosto por agentes policiales del palacio episcopal de Matagalpa junto con cuatro sacerdotes, dos seminaristas y un camarógrafo, después de haber estado 15 días confinados.