El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ordenó a los funcionarios de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como ‘El Chipote’ negar al preso político Miguel Mendoza su derecho a la visita de su familia en ocasión de principio del año 2023.
En un comunicado la familia de Mendoza, indicó que el régimen tomó represalias contra el cronista deportivo por las “publicaciones en redes sociales” que se han hecho, sobre las dos visitas el 8 y 25 de diciembre de 2022, en las que su pequeña hija Alejandra pudo abrazarlo y platicar con él.
“Una funcionaria notificó vía telefónica que la visita programada para Miguel, había sido cancelada siguiendo una orden, debido a las publicaciones en redes sociales. La notificación fue muy escueta y no especificó qué parte de nuestra alegría y la de Alejandra al abrazar a su padre, no les gustó”, reza la declaración de la familia Mendoza.
La Policía Orteguista había informado que las y los presos políticos recibirían las visitas de sus familiares en las fechas festivas de fin de año. Sin embargo, “el pasado 31 de diciembre y 01 de enero, fueron autorizadas nuevas visitas familiares a las personas presas políticas”, dejando a Miguel por fuera de ese derecho.
“Lamentablemente el corazón de nuestra familia está golpeado, particularmente el de nuestra querida Alejandra, a quien nuevamente se le ha privado de ver y abrazar a su padre en esta fecha tan simbólica de principio de año, que como familia acostumbramos a recibir en unidad familiar”, expresó la familia Mendoza.
Añadieron que seguirán “demandando el respeto de nuestros derechos como familia, el de nuestro querido Miguel, encarcelado injustamente por la simple razón de expresar sus ideas, y el de nuestra querida Alejandra, quien sin importar cuánto le priven de ver a su padre, seguirá orando por él y por el duro corazón de quienes nos hacen tanto daño”.
Mendoza fue secuestrado en junio de 2021, condenado por el falso delito de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional en perjuicio del Estado de Nicaragua y de la sociedad”; y fue hasta el 8 y 25 de diciembre que pudo ver a su hija Alejandra de 8 años de edad.