Destacados / Nacionales · 05/08/2022

Rosario Murillo amenaza con cárcel a Monseñor Rolando Álvarez

La vicedictadora Rosario Murillo amenazó este viernes con cárcel a los “personajes que dicen representar autoridad” del “cristianismo” que cometan el “delito” y “pecado” de “lesa espiritualidad”, en clara referencia a Monseñor Rolando Álvarez.

No estamos desequilibrados como quienes pretenden ver el mundo desde pequeños espíritus. No estamos para bufonismos o bufonescos actos que quedaron atrás y que representan el absoluto desprecio”, dijo Murillo a través de sus medios propagandísticos, para quien “nadie quiere vivir generando conflictos, ansiedades”.

Aquí en esta patria bendita hay leyes, también a tomar en cuenta que no se pueden, no se deben infringir las leyes y mucho menos cometer delitos, porque provocar, hacer ostentación de impunidad es un delito, sobre todo cuando lo que se provoca es discordia. Hay leyes no se puede sembrar odio o discordia”, añadió.

“Cuando se pierde el respeto a sí mismo, o el respeto a la otra persona, a la comunidad, a la familia, a símbolos que son sagrados de nuestras creencias, cuando se pierde el respeto y la persona se vuelve cosa. Todos hemos conocido a lo largo de nuestras vidas como instituciones que merecen respeto y, generar descrédito hacia esas instituciones que merecen respeto, también es un delito, es pecado de lesa espiritualidad”, aseguró.

Ayer jueves, monseñor Rolando Álvarez denunció que la Policía Orteguista impidió su salida del Palacio Episcopal de Matagalpa y más temprano fue asediado por decenas de oficiales mientras rezaba con la imagen del Santísimo Sacramento.

He querido salir a la Catedral a ofrecer la Santa Misa, pero obviamente las autoridades superiores no han dado permiso”, dijo el obispo en una transmisión de Facebook.

Estamos retenidos en nuestra propia Curia Episcopal de Matagalpa”, dijo anoche.

Murillo dijo que “la persona que odia se pone en evidencia, confirma conductas que vienen conociéndose a lo largo de los años, conductas inapropiadas sobre todo cuando se trata de personajes que dicen representar autoridad, ningún ser humano cristiano puede llenarse de odio, destilar odio, no le autoriza la sagrada creencia del cristianismo”.

El odio es un crimen y todo crimen es un delito, un delito que debe investigarse y luego también desde las instituciones respectivas tomar las medidas pertinentes para que nunca más la violencia o el odio pretendan arrebatarnos la paz”, amenazó.