Especiales · 05/04/2021

Sin rastro de US$54.7 millones prestados para combatir Covid-19 en Nicaragua

*Por Expediente Público

Entre junio y diciembre de 2020 el gobierno de Nicaragua contrajo préstamos por US$310.04 millones para hacer frente a los efectos de la pandemia del Covid-19. ¿Cómo se gastó ese dinero?

Si bien US$185.3 millones del Fondo Monetario Internacional (FMI) estaban destinados a sostener la balanza de pagos, había US$43 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) destinados directamente a atender las necesidades de salud pública provocado por la Covid-19.

Otros más de US$11.7 millones del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) para el programa de emergencia, prevención y contención de la pandemia.

Un análisis de las contrataciones públicas realizado por Expediente Público constata solo compras por 468,402.08 córdobas, equivalentes a 13,538 dólares, realizadas con fondos del BID en 2020, pero seis de estos procedimientos fueron anteriores a la aprobación del contrato con el Gobierno de Nicaragua el 31 de julio de 2020.

Un registro sobre el uso de estos fondos tampoco está en la sección de Covid-19 creada en el Sistema de Contrataciones Administrativas Electrónicas (Siscae), donde la información se muestra también incompleta, ya que solo aparecen publicados 19 adquisiciones que realizó el Ministerio de Salud (Minsa), ocho que llevó a cabo el Ministerio de Educación (Mined), pero todas con fondos del Tesoro.

Seis contrataciones del Ministerio de Hacienda y Crédito Público (MHCP) están dentro del Programa de Integración Fronteriza del BID, por 607,587 córdobas y 2,966 dólares, es decir, unos 20,500 dólares en total, pero es una cifra poco realista frente a las necesidades generadas por la emergencia, se desprende el análisis de las compras oficiales.

El 31 de julio de 2020 el BID informó la aprobación del préstamo por U$43 millones para el programa NI-L1161: Respuesta Inmediata de Salud Pública para Contener y Controlar el Coronavirus y Mitigar su Efecto en la Prestación del Servicio en Nicaragua, con el cual comprarían equipos para 15 laboratorios y adaptaría la infraestructura en cuatro de ellos para “la detección y seguimiento” de casos, así como fortalecer la capacidad de recopilación y difusión de información sobre la propagación del virus en Nicaragua, entre otros aspectos.

“Cuando hacemos el análisis de gastos en materia de adquisiciones del Minsa y en la sección de transparencia Covid-19 de nicaraguacompra.gob.ni, no aparecen por ninguna parte los montos que fueron suministrados por diferentes organismos multilaterales destinados a la emergencia”, explicó a Expediente Público Dayra Valle, especialista en Presupuesto Público.

Estos fondos tampoco fueron ejecutados por el Minsa o Mined porque no eran los órganos correspondientes, pero tampoco por Hacienda, por eso, “no se conoce a quiénes han sido adjudicados los proyectos ni el nivel de ejecución, algunos fondos eran para ejecutarse el año pasado, mientras el 60% se iban a ejecutar en el 2021 y otra parte en el 2021, pero ya debió ejecutarse al menos una parte”, explica Valle.

Los préstamos son incluso mucho mayores de lo que se ha ejecutado por el Minsa para combatir la pandemia (14.8 millones de dólares en 2020), o al menos, de lo que se sabe, explica Valle.

La experta agrega que en el préstamo del BID “se hace énfasis que el ejecutor es el MHCP y la unidad técnica de apoyo es el Minsa, pero cuando uno revisa el programa anual de contrataciones de Hacienda para 2021 y busca ejecución de fondos vinculados con el BID, pero son pagos de salarios, en específico la única adquisición de Covid-19 para limpieza de puestos fronterizos y eso va a costar poco más de 530 mil córdobas”.

En el caso del BCIE no existe ni un solo registro de los 11.7 millones de dólares del programa de emergencia, atención, prevención y contención del Covid-19, que fueron tomados al modificar un acuerdo de préstamo de 67 millones de dólares destinados a la construcción de una carretera.

Adquisiciones COVID-19 del MINSA en 2020
Tabla interactiva: Adquisiciones COVID-19 del MINSA en 2020 y Línea de tiempo de contrataciones adjudicadas del MINSA para el COVID-19

Las compras del Estado para la emergencia

En el 2020, el Minsa compró diversos productos en concepto de bienes, entre los que destacan: materiales de reposición periódica (MRP), insumos médicos, medicamentos, materiales de limpieza, materiales de laboratorio, entre otros. No obstante, solo en muy pocos casos se menciona en el descriptor de estas adquisiciones que serán utilizados para pacientes con Covid-19 o que son utilizados para emergencia o urgencia por la pandemia.

En el año 2020, el Minsa realizó 9,559 procedimientos de compras públicas que permitieron adquirir bienes, servicios, obras y consultorías. La gestión de compra de Salud representó aproximadamente el 25% del total de los procedimientos que se registraron en el portal www.nicaraguacompra.gob.ni. Aumentó cerca de 15.5% durante el 2020, en relación al año 2019, por las necesidades emergentes producto de la pandemia del COVID 19. En total, hubo compras por 14.8 millones de dólares el año pasado para combatir la pandemia, según registros de compras del Minsa que aparecen en el Siscae analizados por Expediente Público.

Valle explica que a pesar que existen compras de organismos multilaterales para atender a la pandemia, estos no corresponden a los préstamos realizados.

El plan anual de contrataciones del Minsa o en todo caso MHCP no estableció un clasificador específico para determinar cada uno de los gastos que fueron destinados en el 2020 para enfrentar la pandemia. Esta omisión impide brindar un dato exacto de dicho gasto por tipo de adquisición (bienes, servicios, consultorías y obras).

Entre las adquisiciones realizadas por el MINSA durante el año, destacan la de insumos adquiridos para el laboratorio del Centro Nacional de Diagnóstico y Referencia (CNDR) del MINSA, que es el único laboratorio que está autorizado en el país para realizar las pruebas de Covid-19, por 570 mil córdobas y 135 mil dólares.

Los MRP son bienes fundamentales en la atención de salud. De la revisión efectuada se logró detectar cuatro procedimientos con mención en su descriptor que estaban dirigidos a la atención del Covid-19. Estos bienes fueron adquiridos a través de la modalidad de contratación simplificada y se realizaron entre mayo y junio del 2020, siendo adjudicados ocho diferentes proveedores, todas empresas. Destaca que este es el tipo de bien que aparece registrado con un mayor gasto que fue financiado con recursos del Gobierno.

Una primera adquisición fue posible a través de una licitación pública que se realizó en abril del 2020 y que totalizó aproximadamente 138 mil dólares con fondos del Gobierno, siendo adjudicada en mayo a cuatro diferentes proveedores (Promoción Médica SA, Sánchez Collado Cía. limitada, Sánchez y Martínez SA y Diamed Nicaragua SA). Una segunda adquisición se dio por contratación por un monto de un poco menos de 500 mil córdobas.

En total, el Minsa realizó 17 procedimientos para la adquisición de medicamentos e insumos médicos en 2020. Solo 17 adquisiciones de obras fueron identificadas como relacionadas a las necesidades que generó la pandemia. En total, estas adquisiciones alcanzan un monto de cerca de los 2 millones 700 mil córdobas.

Al revisar los procedimientos del rubro materiales de limpieza y aseo, solo cuatro de ellos hacen mención que serían utilizados para enfrentar el Covid-19, los que ascienden un poco más de los 335 mil córdobas.

Se identificaron únicamente siete adquisiciones de servicios, en su mayoría de servicios de alimentación que pueden asociarse a necesidades por satisfacer a partir de la pandemia y solo una de reproducción de materiales. En total estas compras ascienden a un poco más de C$2 millones 500 mil córdobas.

Por último, se encontró la compra de bienes que se categorizan como varios que fueron utilizados para enfrentar la pandemia con montos de 2.6 millones de córdobas y 862 mil dólares. Ejemplo de estos bienes son: materiales de oficina, productos varios para funcionamiento y habilitación de salas de atención de pacientes con coronavirus, combustible, etc.

Además, aparecen otras adquisiciones del Ministerio de Educación (Mined) que alcanzan los 16 millones de córdobas que tienen como fuente de financiamiento los recursos del Tesoro.

Inacción en enero

El Gobierno de Nicaragua destinó para 2021 la cantidad de 702 millones de córdobas para atender la pandemia del Presupuesto General de la República (PGR) y anunció que gastará 107 millones de dólares para comprar la vacuna con fondos de organismos multilaterales, pero según un análisis de Expediente Público del plan anual de contrataciones no hay un monto total preciso de los recursos que el Minsa destinará realmente para esta emergencia.

Expediente Público identificó 177 procedimientos que podrían estar vinculados a enfrentar la pandemia entre los 704 procedimiento del Minsa en enero de 2021, por un monto que apenas sobrepasa los 18 millones de córdobas.

La mayoría eran procedimiento para la adquisición de bienes como materiales de reposición, insumos médicos, productos de limpieza y medicamentos.

Sin embargo, el Minsa realizó al menos dos procedimientos importantes entre febrero y marzo por 237 millones de córdobas para adquirir pruebas covid-19, así como insumos y materiales de laboratorio para las mismas.

Política errática frente a la pandemia

¿Cómo se gastaron más de 300 millones en préstamos de organismos multilaterales para combatir la pandemia en 2020? Faltan datos, pero igual quedan más preguntas abiertas. ¿Cuántas vacunas contra el Covid-19 se han aplicado hasta ahora? No se sabe. ¿Cuántas pruebas PCR se hicieron y qué porcentaje es positivo? Se desconoce. ¿Cómo se destinarán los más de 700 millones de córdobas para atender la emergencia en 2021? No hay un plan completo publicado.

En 2020 no se modificaron los hospitales y compraron material de protección y cerramos, según cuentan médicos y personal sanitario, con tres mascarillas por persona para una semana, señala el médico José Antonio Delgado, especialista en Salud Pública.

El mismo Ministerio de Salud (Minsa) cumplió en abril 2021 un año de no brindar el boletín epidemiológico semanal. El Minsa solo reconoce 6,629 casos de Covid-19 al 29 de marzo de 2021, aunque es ampliamente conocido que no se realizan pruebas masivas de Covid-19 en Nicaragua, además, afirma que solo existen 177 muertes por el coronavirus. Sobre estos datos hay dudas, pues el Observatorio Ciudadano Covid-19 considera que, al 17 de marzo, 13,278 personas pudieron haber contraído la enfermedad y 3,009 muertes eran atribuibles al coronavirus.

Sobre la cantidad de vacunados no hay cifras oficiales, aunque esto ya forma parte de los reportes estadísticos mundiales, sobre las expectativas de vacunar al 75% de la población, no hay datos concretos sobre el alcance actual de las 335 mil dosis de la vacuna Covishield de dos lotes donados en marzo por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Gobierno de India.

La vicepresidenta Rosario Murillo llegó a decir el 31 de julio de 2020 que Nicaragua estaba en capacidad de producir la vacuna rusa contra el Covid-19, pero ni siquiera anunció cuántas dosis de la Sputnik V fueron donadas en febrero de 2021 Actualmente se desconoce cómo siguen las negociaciones para la compra de este medicamento a Rusia e India, ante la titánica o propagandística labor de vacunar a más de cuatro millones de personas frente a las dificultades globales de producción y distribución del remedio contra el nuevo coronavirus.

La campaña de inmunización inició el 2 de marzo y pese a las recomendaciones de la OMS no colocó al personal de salud en la primera línea de vacunación.

En función de la Covid-19 que estará presente de 2021 y parte de 2022 se debieron remodelar las Unidades de Cuidados Intensivos con las áreas de emergencia y no las consultas externas, manifestó Delgado.

“Cualquier acción presupuestaria en Salud en 2021 debería estar enmarcada en la compra y recepción de vacunas. Es inconcebible que Panamá, El Salvador y Costa Rica puedan comprar la vacuna de la Pfizer, nosotros no podemos comprarla porque no tenemos capacidad de almacenamiento, la intención presupuestaria debería estar preparada para recibir cualquier tipo de vacuna”, expresa.

Otras prioridades del Gobierno en materia de Covid-19, a juicio de Delgado, deberían ser mejorar la infraestructura en relación a la pandemia, comprar pruebas, unidades especiales para las pruebas y vacunas.

“Lo primero que debería ocurrir para confiar en el Minsa y que el Minsa recupere la confianza, es la transparencia. Sería muy fácil si los medios de comunicación dan a conocer lo que se va a hacer y las asociaciones médicas empezaran a decir que están de acuerdo”, agrega.

“La debilidad reconocida tácitamente por el Minsa es que tiene serios problemas con pacientes con enfermedades crónicas y pacientes con hemodiálisis, porque ellos las vinculan con las muertes de Covid-19”, sostiene. Entre marzo y octubre de 2020 los médicos independientes señalaban una sobremortalidad de siete mil personas, pero el Gobierno dejó de actualizar estos datos, advierte Delgado.

El experto señala que las secuelas post Covid-19 rondan el 35 por ciento, por ejemplo, de dolores en las articulaciones, y ese enfoque no está en el plan de acción, así que debería haber una política en Salud, muchos programas prioritarios tendrán que pasar a un segundo lugar.