Opinión / Ensayos · 31/10/2022

Una caracterización de Valdrack Jaentschke (a) Marlon

Por: Stillyanos Ramos

El flamante Ex Vicecanciller de Ortega y Murillo, exembajador de Nicaragua en Guatemala, exministro asesor de Ortega para Políticas y Asuntos Internacionales, exrepresentante ante la Comunidad del Caribe, CARICOM, exrepresentante ante la Asociación de Estados del Caribe, AEC, y ex de más de 16 cargos diplomáticos, fue nombrado en el cargo de Encargado de Negocios y Relaciones Consulares de la Embajada de Nicaragua en Costa Rica en Julio del 2022, luego de la aceptación de la renuncia de quien era el embajador, Duilio Hernández Avilés, familiar cercano del Jefe del Ejército Nacional, General Julio Cesar Avilés Castillo.

A simple vista y a ojos de la comunidad diplomática, una democión en toda regla, pero dentro del submundo que se vive en Nicaragua, es una misión más asignada a uno de los más fieles servidores o serviles de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Pero ¿de dónde viene Valdrack Ludwing Jaentschke Whitaker? ¿Qué se sabe de este oscuro personaje, del que mucho se habla en los corrillos diplomáticos dentro y fuera de Nicaragua, sobre todo en Costa Rica? ¿Por qué enviarlo a Costa Rica en un cargo de tercero o cuarto nivel, dentro del escalafón diplomático?

Conocido simplemente como Valdrack Jaentschke, nació en Corn Island, Bluefields, cabecera departamental del antiguo departamento de Zelaya, actualmente la Región Autónoma de la Costa Caribe Sur, RACCS, el 22 de agosto del 59. Se le pierde la pista antes de 1985, aunque muchos aseguran que era “19 de Julio”, término que se empleaba para señalar a los que, al triunfo de la Revolución Popular Sandinista, RPS, el 19 de julio de 1979, aparecieron como por arte de magia en las filas de los vencedores de la dictadura del General Anastasio Somoza Debayle. Para la fecha señalada, 1985, aparece formando parte de la Dirección General de la Seguridad del Estado, DGSE, al frente de la Sección D, Operaciones Psicológicas, del Departamento F – 8, Lucha contra Bandas, bajo la responsabilidad de Roger Mayorga y luego por Roger Ramírez. Esta sección se encargaba de realizar el desgaste social y económico de la contra, penetración de agentes dentro de las organizaciones que adversaban a la revolución, incluida la Iglesia Católica, realización de propaganda y contra propaganda y neutralización de las filas enemigas. Luego, en el Departamento F – 8, ya bajo el mando directo de Lenin Cerna, se fusionaron otras secciones que pertenecían a la Contrainteligencia, tales como Frente Interno, Actividades Subversivas Enemigas, Base Social de la Contrarrevolución, Sistemas de Medidas del Descubrimiento, Información y Análisis.

En el desarrollo de todas estas actividades dentro de la Sección D, Jaentschke, quien usaba el seudónimo de “Marlon”, acumuló mucha experiencia en el desmantelamiento de la actividad de los grupos opositores en los años 80’s, y en el reclutamiento e infiltración de agentes. El objetivo de la Sección D era crear descomposición a la base social enemiga y crear contradicciones dentro de ella, una vez penetradas las organizaciones mediante los agentes “sembrados” dentro de estas. Cobra notoriedad en la Seguridad del Estado cuando en octubre de 1986, le dejaron en sus manos el caso del piloto norteamericano Eugene Hassenfus, luego de ser derribado el avión con el que abastecía a la “Contra”, ya que Valdrack era de los pocos oficiales que hablaba inglés, por su origen costeño, lo cual le ganó mucha simpatía entre sus jefes. Sin embargo, para todos era evidente que se afrentaba de sus orígenes raciales, lo cual le causaba un gran complejo social.

La derrota electoral lo deja fuera del grupo de oficiales de la Dirección General de la Seguridad del Estado, DGSE, que son escogidos para pasar a conformar la Dirección de Información para la Defensa, DID, de acuerdo con los Acuerdos de Transición pactados entre el General Humberto Ortega Saavedra, Jefe del Ejército, y Antonio Lacayo Oyanguren, Ministro de la Presidencia de Violeta Barrios de Chamorro. De regreso a la Costa Caribe, en los años 90’s se le ve formando parte de organizaciones de Sociedad Civil, manejando mucho dinero de donantes extranjeros, sobre todo norteamericanos. Se vincula al Centro de Estudios Estratégicos, CEEN, donde coincide con miembros de los gobiernos de Violeta Barrios, de Arnoldo Alemán y Enrique Bolaños. Funda una ONG de nombre Nicaraguan for Development Center, NDC, a la que AID le retira el financiamiento poco tiempo después de iniciar sus operaciones, por malos manejos administrativos. Es en estos años donde desarrolla su acercamiento y confianza con la entonces exprimera dama, Rosario Murillo, a quien mensualmente entregaba un cheque para su sostenimiento económico.

Al volver al poder Daniel Ortega en el 2007, de la mano de su valedor, el también costeño Lumberto Cambell, y de una agradecida Rosario Murillo, aparece en la Cancillería de la República ostentando el cargo de Vicecanciller. Su ascenso meteórico en esta dependencia del gobierno le supuso el nombramiento en 16 cargos diplomáticos conocidos, todo un récord para el país y hay quienes aseguran que además de gozar de la gracia de Murillo, también era del agrado de uno de los principales asesores de Ortega, el ya fallecido Paul Oquist, Asesor de Políticas Públicas del dictador, quien además seria, junto con Jaentschke, los encargados de hacer los periplos internacionales para denunciar ante los gobiernos extranjeros que el país había sido víctima de un intento de golpe de estado en abril del 2018.

Luego de abril del 2018, cuando se da la conversión de la Cancillería de Nicaragua en un centro de dirección para la conspiración internacional, a través de las distintas embajadas, la “Diplomacia de Guerra” que añoraban los viejos oficiales de la Seguridad del Estado, dio pie para que Ortega decidiera utilizar de mejor manera los conocimientos y la experiencia del antiguo oficial “Marlon”, por lo que le fueron retirados todos los nombramientos anteriores y es ubicado en países de Centroamérica donde se habían refugiado miles de exiliados y amenazaban convertirse en grupos armados contra Ortega. Es enviado como Embajador a Guatemala, donde se habían conformado algunos grupos rebeldes que se trasladarían a Honduras. Entonces es enviado a Honduras, ya sin el rango de embajador, para evitar problemas con las autoridades de ese país, por las actividades ilegales que desempeñaría, tales como la coordinación con agentes de la inteligencia de Nicaragua que operaban ahí, para la ubicación y eliminación física de los principales cabecillas de los grupos armados que usaban a Honduras como base de operaciones, actividad que cumplió con notable eficacia, ya que la mayoría de los líderes de los grupos armados fueron exterminados.

Finalizada su misión en Honduras, es trasladado en julio de este año a Costa Rica, país donde se ha acumulado una gran cantidad de exiliados nicaragüenses, algunos de los cuales forman parte de grupos rebeldes que adversan al dictador Ortega y de grupos de la oposición cívica que tienen gran beligerancia y visibilidad internacional. Llamó poderosamente la atención el hecho de que asume el cargo de Encargado de Negocios y Relaciones Consulares de la Embajada de Nicaragua en Costa Rica, un cargo de tercer nivel que no necesita placet de estilo por parte del gobierno del país y que le facilita llevar a cabo actividades, irregulares e ilegales por demás, que con el cargo de Embajador no le serian permitidas. La nueva misión de Valdrack Ludwing Jaentschke Whitaker, “Marlon”, es poner en práctica su vieja experiencia de cuando estaba al frente de la “Sección D” del Departamento F – 8, de la Dirección General de la Seguridad del Estado de los años 80’s, el descabezamiento y eliminación de los grupos que se oponen a quien considera un Dios viviente, por quien vive y mata, su Alfa y su Omega, Daniel Ortega.