La Unidad Médica Nicaragüense (UMN) criticó este miércoles la “política de secretismo” del régimen de Daniel Ortega sobre los planes de vacunación contra el COVID-19 en el país, donde el Ministerio de Salud (MINSA) inició desde ayer a aplicar la vacuna rusa Sputnik V.
“Al igual que con el manejo de la pandemia, el Gobierno sigue sin compartir información vital para la población. Seguimos sin tener información transparente acerca del comportamiento epidemiológico de la pandemia, de la cobertura y resultados de las pruebas diagnósticas, y sin tener acceso a las pruebas de forma libre, como ocurre en el resto de países. Al continuar el Gobierno con su política de secretismo sobre los planes de vacunación, es natural que la población exprese temor, desconfianza y desinformación hacia la vacuna, dada la falta de acceso a información adecuada”, dijo el gremio médico a través de un comunicado.
La UMN demandó al MINSA “transparencia en la información relacionada al manejo de la pandemia y de las medidas de prevención y control, incluyendo la vacunación”.
También exigió “cumplir con las recomendaciones de la OMS relacionadas con el manejo de la pandemia y de las medidas de prevención y control, incluyendo la vacunación”, “comunicar ampliamente el plan nacional de vacunación a toda la sociedad nicaragüense”, e “implementar una campaña de comunicación que informe a la población adonde y cuando debe de acudir para ser vacunados, de las ventajas de la vacuna y de los posibles efectos secundarios”.
El gremio médico, además, demandó a las autoridades de la salud a “priorizar la vacunación del personal de salud, tanto del sector público, como privado y organizaciones de la sociedad civil que se encuentran en la primera línea de atención”, así como a las poblaciones vulnerables: adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.
Asimismo, que se ofrezca ampliamente las vacunas al resto de la población, una vez atendidas las necesidades de los grupos prioritarios.
“La Unidad Médica Nicaragüense recomienda al pueblo nicaragüense a informarse sobre las ventajas y riesgos de las vacunas, a exigir su derecho a vacunarse y a mantener las adecuadas medidas preventivas como distanciamiento social, uso de mascarillas e higiene frecuente de manos con agua y jabón o en su defecto uso de alcohol gel”, concluyó la UMN.
Este miércoles, el MINSA informó que extenderá el proceso de vacunación contra el COVID-19 de forma escalonada, dando prioridad a las personas con enfermedades renales.