Destacados / Nacionales · 08/03/2023

CALIDH condena “la política misógina del Estado” de Nicaragua

Las mujeres integrantes de la Asamblea General del Centro de Asistencia Legal Interamericano en Derechos Humanos (CALIDH), condenaron este miércoles “la política misógina del Estado” de Nicaragua, en el marco del Día Internacional de la Mujer.

La mujeres miembros de CALIDH, demandaron “democracia, derechos humanos y Estado de Derecho en Nicaragua” y recprocharon que Rosario Murillo en su cargo de “vicepresidenta” no tenga solidaridad con su propio género.

Condenamos la política misógina del Estado de encerrar a las mujeres opositoras y manifestamos nuestra solidaridad con las que fueron desterradas a Estados Unidos y con las que siguen encerradas, especialmente, con la señora Martha Ubilla, adulta mayor”, dijo CALIDH en una declaración.

Condenamos la ausencia absoluta de solidaridad de la vicepresidenta de la República, Rosario Murillo Zambrana, con las mujeres nicaragüenses y condenamos que gobierne con prácticas patriarcales y contrarias a los derechos de las niñas, adolescentes y mujeres”, añadieron.

Para CALIDH, las mujeres nicaragüenses “están atravesando uno de los momentos más difíciles de la historia de su país en el marco de un gobierno irreversiblemente autoritario que ha restringido todos los derechos humanos, incluidos los derechos de las mujeres a una vida plena y libre de violencia”.

Nos unimos, como latinoamericanas junto a nuestras hermanas nicaragüenses en sus pronunciamientos para rechazar y erradicar todas las formas de violencia contra las niñas, las adolescentes y las mujeres en su diversidad”, dijeron.

Condenamos que las nicaragüenses, en el marco de la supresión de sus derechos, no puedan salir hoy a manifestarse a las calles ante la sociedad y las autoridades de gobierno. Asimismo, Condenamos la destrucción del derecho a la libre movilización, concentración y reunión impuesto por el gobierno de Nicaragua a las compatriotas de ese país”, añadieron.

Las mujeres integrantes de CALIDH también expresaron su preocupación por el aumento de la violencia contra las niñas, adolescentes y mujeres en todos los ámbitos “desde que el gobierno empezó a perpetrar los crímenes de lesa humanidad en abril de 2018”.

En ese sentido, denunciaron el aumento de los femicidios, los femicidios en grado de frustración y las niñas y niños que quedan en estado de orfandad y el aumento de las formas de saña y crueldad en su perpetración.

Además se solidarizaron con las trabajadoras de los sectores más invisbilizados y que sufren de explotación laboral y condiciones precarias sea por la complicidad del Estado o por su desinterés: “abrazamos a nuestras hermanas trabajadoras de las maquilas de zonas francas textiles/vestuario, trabajadoras sexuales, trabajadoras del comercio informal y asistentes del hogar”.

Condenaron la “ausencia absoluta” de políticas integrales que garanticen la plena vigencia de los derechos de niñas, adolescentes y mujeres en diversos ámbitos, entre ellos, la educación sexual integral, la interrupción legal de embarazo por motivos terapéuticos, el derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos y el cierre progresivo de las brechas económicas entre hombres y mujeres.

Condenamos la ausencia absoluta de protección de las mujeres trans, de políticas públicas y de registros de la violencia de las que son víctimas día a día, incluso transfemicidios, como la manifestación de la más horrenda forma de violencia machista con la complicidad estatal”, apuntaron.

Por otro lado, CALIDH demandó que las mujeres nicaraguenses víctimas de los diversos atropellos estatales que configuran crímenes de lesa humanidad “sean reparadas integralmente, especialmente, las que han sido presas políticas, las proscriptas políticas, las desterradas y las que han tenido que huir para poder garantizar su vida y la integridad física”.

Nos solidarizamos con todas las madres que perdieron a sus hijos en la represión y manifestamos nuestro compromiso constante de acompañarlas legal y gratuitamente en la búsqueda de justicia. Asimismo, con las que han tenido que migrar forzadamente para empezar de cero en la precariedad solas o con sus familias”, anotaron.

Finalmente, CALIDH exigió al Estado de Nicaragua “garantizar el derecho a una vida plena y libre de violencia para las niñas, adolescentes y mujeres”.