A juicio del analista político Óscar René Vargas las recientes declaraciones que hiciera un teniente coronel y agregado de Defensa de los Estados Unidos sobre que el Ejército Orteguista es “parte del gran crecimiento y estabilidad de este país”, estaría dirigido a que el gobierno de esa nación podría estar contemplando la posibilidad de una “salida al suave” de convivir con el “dinosaurio”, en referencia a la dictadura de Daniel Ortega en Nicaragua.
Las polémicas declaraciones fueron hechas por el Teniente Coronel Róger Antonio Carvajal Santamaría, quien dijo concretamente al jefe del Ejército Orteguista, Julio Avilés: “Nosotros esperamos trabajar con las fuerzas armadas de Nicaragua, en las áreas que usted indicó. Ese ha sido el mensaje que yo he dado, que he hablado con mis superiores, y espero seguir en esa ruta. Me da gusto de verlo en buena salud, la verdad es que nos preocupa porque ustedes son gran parte del gran crecimiento y estabilidad de este país”.
“Mi temor es que a la Administración (de Joe) Biden, su preocupación más importante sea el problema migratorio proveniente del triángulo del norte (Guatemala, Honduras, El Salvador) que el problema sociopolítico de Nicaragua. Por lo tanto, la solución que ellos pueden estar contemplado es una ‘salida al suave’ de convivir con el ‘dinosaurio’. En esa salida al suave necesitan mantener buenas relaciones con el ejército (de) que ‘son parte del gran crecimiento y estabilidad’ del país”, comentó Vargas a La Mesa Redonda.
Carvajal Santamaría, fue parte de los asistentes de una reunión de trabajo con los agregados de defensa, militares, navales y aéreos y jefes de misiones acreditados en Nicaragua, actividad que estuvo presidida por Avilés, sancionado por Estados Unidos.
El 22 de mayo de 2020, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, sancionó a Julio Avilés y dijo que este “está alineado políticamente con el presidente Ortega, se negó a ordenar el desmantelamiento de las fuerzas paramilitares o parapolíticas durante y después de los levantamientos políticos que comenzaron el 18 de abril de 2018″.
Estados Unidos aseguró que “los militares proporcionaron armas a la parapolicía que llevó a cabo actos de violencia contra el pueblo nicaragüense, que resultó en más de 300 muertes, actos de violencia significativos y abuso de los derechos humanos contra personas asociadas con las protestas”.
Cabe destacar que ayer miércoles, Estados Unidos se unió junto a otros siete países para denunciar “la ruptura del orden democrático” en Nicaragua.
Al mismo tiempo señalaron que Nicaragua “no reúne las condiciones necesarias” para la celebración de un proceso electoral libre y justo, lo que “pone en tela de juicio la validez y la legitimidad de las elecciones de noviembre, tal y como está organizado actualmente”.